“Somos conscientes de que si hacemos una cuarentena total va parar todito y con todo el impacto de la cuarentena total”, explicó el doctor Guillermo Sequera, director de Vigilancia de la Salud, entrevista en Unicanal sobre el comportamiento de la pandemia de COVID-19 en Paraguay durante agosto, y las perspectivas para setiembre.

“Para no usar la cuarentena total en este momento, hay que dejar la cuarentena total para el momento más difícil”, señaló categóricamente. “Esto ayuda e increíblemente, así como en la primera parte de la cuarentena, cuando teníamos un fallecido, dos fallecidos, los primeros fallecidos, paraba la ciudad, se sentía eso, se notaba al día siguiente, y dos días después”.

“Ahora prácticamente estamos naturalizando los números de la mortalidad. Pero tuvimos la muerte de los niños, que genera miedo. Hace que la gente se cuide más, algo positivo en ese sentido”, señaló el epidemiólogo.

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No automedicarse

“Si uno tiene dificultad para respirar, es categórico que tiene que ir a consultar sin perder el tiempo. No tiene que automedicarse”, afirmó Sequera, indicando que los síntomas del nuevo coronavirus son principalmente respiratorios, aunque pueden aparecer otras molestias físicas, como cuadros diarreicos en niños. Sin embargo, cuando se tiene una comorbilidad, como diabetes o hipertensión, remarcó que no basta con paracetamol, en estos momentos.

En otro pasaje explicó que, según los datos de meses pasados: “el 5% de los casos se internan, de eso el 1% va a terapia intensiva”.

Por otra parte, Sequera dijo que el riesgo de contagio es nulo cuando una persona se cruza, por un corto tiempo, con otra que es COVID-19 positivo, siempre y cuando ambos utilicen tapabocas y mantengan el distanciamiento.

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Papeles y teclados

“Si se desinfectan los lugares de trabajo es muy difícil de que uno se contagie por los teclados u otros objetos”, respondió acerca de la situación en ambientes laborales. “Cada vez hay menos evidencia de ese tipo de contagio. Es para película de Hollywood. De que ocurre, ocurre, pero uno en un millón. El riesgo es muy, muy bajo si las cosas se están haciendo bien. Si la persona se lavó las manos, si por lo menos por el teclado se pasó un trapo con un líquido de limpieza, con eso es suficiente”.

“Lo importante es que vos te laves las manos y no te toques la cara”, remarcó Sequera. “Es muy difícil contagiarnos por los papeles, cada vez hay más evidencias. A no ser que la otra persona (positivo) haya tosido o estornudado encima de ella. Por eso es fundamental que no vaya a trabajar una persona que está enferma”.

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