“El ministro del Interior, Euclides Acevedo, no puede decir que fue un accidente porque es un mensaje gravísimo”, señaló la abogada Diana Vargas, especialista en Derechos Humanos, sobre el caso del niño baleado por policías.

En contacto directo con GEN y Universo 970 AM esta mañana manifestó que hay uso excesivo de la fuerza, hay abuso e incluso ya es sabido lo discutible que son las barreras; por suerte, hoy en día se cuentan con las cámaras, de lo contrario nos quedaríamos solo con la versión oficial al igual que otros casos no tan visibles.

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Esto no solamente en términos constitucionales legales, sino también de efectividad; entonces, finalmente, cuál es el objetivo que se busca con ese tipo de actividades de la Policía, ya que se sabe que en la práctica muchas veces termina más bien en situaciones de aprietes a los ciudadanos, por lo que le parece absolutamente lógico que una persona prefiera desviar una barrera.

Con la experiencia de trabajo que tiene con la policía, también haría eso si puede dar media vuelta y continuar por otro camino, entonces es la institución policial, el ministro por sobre todo, quien debería hacer una profunda revisión del porqué la ciudadanía desconfía de la institución, y es por eso que se da este tipo de actitudes ciudadanas, de preferir evitar un control, que se supone que es para la seguridad de todos, pero que en realidad genera mayor inseguridad, señaló Vargas.

No hubo infracción

Si bien ayer también emitió una opinión respecto a la irresponsabilidad del padre y de la Policía; no obstante, luego de haber visto las imágenes de que lo que hace el padre es no atropellar, sino retomar y dar media vuelta para no pasar por allí, y cuando se da el momento de que bajen del vehículo, los policías están más concentrados en la aprehensión del padre, es donde se demuestra responsabilidad absoluta de la policía porque el padre no cometió ninguna infracción al retomar la libertad de elegir por dónde circular, por lo que cree que en estos casos tiene mucho que ver la posición de la máxima autoridad.

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“El ministro del Interior no puede decir que fue un accidente, esto es gravísimo y el mensaje que lanza al interior de la institución policial, una institución no deliberante que entiende muy bien los mensajes y sabe leer los mensajes, y realmente me parece que en estos momentos tenemos casi un estado policial donde ellos finalmente son los que están y deciden lo que pasa en la calle, porque las demás instituciones no están en la realidad”, aseveró la abogada.

Por lo que le parece riesgoso para toda la ciudadanía que circula por las calles del país que la máxima autoridad se refiera en términos de “accidente”, incluso haciendo bromas de un hecho absolutamente grave que en un país como Estados Unidos, donde está tan naturalizada la violencia policial, hoy está causando toda una conmoción, y las autoridades paraguayas tienen la suerte por decirlo así, de que todavía exista una cultura de la dictadura que repercute en una ciudadanía que difícilmente se organice y se manifieste para reclamar sus derechos, sostuvo.

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