Ante el ingreso del frente frío y la gran cantidad de niños, niñas y adolescentes en situación de calle, el Ministerio de la Niñez habilitó el Centro Abierto Refugio, en el marco del operativo invierno que busca dar abrigo a los más desprotegidos.

Este centro, que busca proteger a los niños y adolescentes de las bajas temperaturas, está ubicado en la ciudad de Luque, ofrece lugar a 10 niñas, niños y adolescentes (NNA) en una primera etapa, aplicando todas las medidas sanitarias impuestas por el Ministerio de Salud. “Posteriormente se habilitará el centro para albergar a 20 NNA”, afirmó el viceministro de Protección, Eduardo Escobar Said.

Indicó que este refugio busca dar solución a la problemática emergente y agravada por la emergencia sanitaria. “Pretende atender a una población objetivo, sumamente comprometida, que son los niños, niñas y adolescentes en situación de calle, por eso este centro ofrece un espacio acogedor”, apuntó.

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Respuesta inmediata

Por su parte, el viceministro de Planificación, Walter Gutiérrez, destacó la importancia de contar con un espacio como este destinado a la niñez para la temporada de frío. “Este centro cobra una importancia preponderante para poder dar respuesta a la situación de calle de niñas, niños y adolescentes. Sabemos que siempre las necesidades son mayores que los recursos, pero confío en la capacidad del equipo que hoy toma la posta”.

Foto: Gentileza.

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Norma Noelia Molinas, coordinadora del programa Painac, aclaró que el Centro Abierto funcionará las 24 horas, de lunes a lunes, y es un espacio de protección inmediata a niñas, niños y adolescentes que viven en las calles, indígenas o no.

“Aquí recibirán los servicios de alimentación, higiene, un espacio acogedor para dormir y la posibilidad de enlazar con otros dispositivos de protección que tenemos. El centro es como la puerta de entrada de los niños en situación de calle”, expresó.

Evaluación familiar

Agregó que luego de que ingresen se realizará una evaluación con los trabajadores sociales, psicólogos, educadores, para evaluar la situación de cada niño en particular. “En el caso que requiera, por ejemplo, consulta en salud, nosotros podemos realizar la derivación, pues tenemos un trabajo previo con el Ministerio de Salud y el Centro Nacional de Tratamiento de Adicciones”.

Una vez realizada la evaluación, buscarán el nexo con la familia para saber qué vínculo existe entre ambas partes, si está deteriorado, por qué están en calle. Tras el trabajo de evaluación, verán otro espacio de protección como el Centro Transitorio de Protección, el Centro de Convivencia Pedagógica Ñemity u otro dispositivo en convenio con el ministerio, que puede ser el Hogar Madre Tierra, ubicado en la ciudad Paraguarí, o el Centro Terapéutico Vida Sana en Encarnación, siempre teniendo en cuenta el interés superior del niño y su bienestar inmediato.

Cuentan con todo lo necesario para la higiene de los niños y niñas. Foto: Gentileza.

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“Internamente respondemos a las intervenciones que realiza el Dispositivo de Respuesta Inmediata (DRI), que realiza los abordajes en calle y los monitoreos en las zonas llamadas ‘focos críticos’. Externamente realizamos un trabajo interinstitucional, con instituciones y organizaciones del Sistema de Protección. Cabe resaltar que contamos con la habilitación del Ministerio de Salud y tenemos estrictos protocolos sanitarios, internalizados por cada uno de los 16 funcionarios que prestarán servicio en este lugar”, puntualizó.

50 niños protegidos

Cabe recordar que durante el #OperativoInvierno del 2019 protegieron a casi 50 niñas, niños y adolescentes en situación de calle, en su mayoría de pueblos originarios, los cuales fueron derivados al albergue Kuarahy Rese, desde donde se fortaleció el vínculo con su comunidades de origen. Este año y debido a las medidas sanitarias por la COVID-19, aún no se han reportado niñas, niños o adolescentes en situación de calle.

Participaron los viceministros Walter Gutiérrez, de planificación, y Eduardo Escobar, de protección de derechos; Eduardo Sosa, director general de protección y promoción de derechos; Norma Molinas, coordinadora del programa de atención integral de niñas, niños y adolescentes en situación de calle (Painac) y funcionarios del Minna.

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