Paraguay viene registrando un crecimiento sostenido desde hace un par de décadas, pero es un crecimiento moderado, constante, pero lento, manifestó a La Nación/Nación Media, Marcos Prado Troyjo, economista y exviceministro de Economía de Brasil. El también diplomático dijo en ese marco que la clave para acelerar el crecimiento es combinar las ventajas comparativas con la creación de ventajas competitivas.
Sobre la última, explicó: “Paraguay, en proporción al tamaño de su economía, es un actor relevante en la exportación de alimentos. La idea sería aprovechar esos recursos para transformar al país en una sociedad altamente desarrollada en tecnología”. Sostuvo que eso daría a nuestro país una nueva fuente de crecimiento que va más allá de la demanda externa de soja o carne. Señaló que hoy Paraguay tiene más cartas a su favor, como su abundante energía y la llegada de la criptominería. Pero remarcó: “¿Cómo usar esas cartas a favor?
VENTAJAS COMPARATIVAS
Comparó a nuestro país con los Emiratos Árabes y Venezuela.
Expuso que ambos tienen ventajas comparativas en combustibles fósiles. Sin embargo, en los últimos 25 años, Emiratos utilizó su riqueza energética para construir uno de los sistemas financieros más sofisticados del mundo, desarrollar una infraestructura turística de primer nivel y atraer inversión en ciencias de la computación.
Venezuela, en cambio, reinvirtió solo en su propia industria energética o destinó los recursos a expandir el papel del Estado en la economía, sin diversificar. Entonces, la diferencia está en cómo se aprovechan las ventajas comparativas para crear nuevas capacidades competitivas. “Emiratos Árabes y, cada vez más, Arabia Saudita, lo hicieron. Venezuela, no”, apuntó.