Desde el trabajo con frigoríficos hasta la importación de ejemplares para aumentar el rebaño, el sector ovino se plantea estrategias para impulsar la producción local, pensando en la exportación de carne, reveló Mustafá Yambay, referente del rubro. El profesional destacó la calidad de la genética ovina local, pero remarcó igualmente la necesidad de un censo en el sector para obtener datos reales y poder realizar proyecciones.

Según reveló Yambay a La Nación/Nación Media, el sector ovino está desarrollando las primeras conversaciones para explorar la operativa y los requerimientos del trabajo con frigoríficos a fin de determinar dónde obtener más materia prima. “Nosotros importamos vientres para el aumento de la majada, lo fuimos haciendo. Con este tema del frigorífico tendríamos que ver bien cuáles son las cantidades. Como una posible estrategia se está viendo de aumentar el flujo de importación”, añadió.

El referente del sector destacó además que si bien está aumentando la producción ovina en el país, es aún incipiente, si el objetivo es lograr la exportación. “Como mucho se faenan 100 a 150 animales por semana, pero para un contrato mínimo de exportación necesitaríamos arriba de 200 por día. Realmente, tenemos que crecer mucho todavía ahí”, enfatizó.

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Al igual que el aumento del número de ovinos, el sector necesita de la realización de un censo real para obtener cifras reales y así realizar proyecciones, a criterio de Yambay. Más allá de los desafíos, se han logrado grandes conquistas en el rubro, sobre todo en lo referente a la genética.

“Nos pusimos a tono con los países de la región. Incluso, en algunas razas diría que tenemos mejor genética comparando razas específicas. Dorper, por ejemplo, es una raza sobresaliente, al igual que Hampshire Down, Texel y Santa Inés, que dieron pasos gigantes hacia el mejoramiento”, resaltó.

Yambay hizo hincapié además en lo rentable que puede ser el rubro ovino, especialmente al compararlo con la producción bovina en término de producción de kilos por hectáreas. “Los ciclos son tres veces más rápidos y el ingreso que uno puede tener haciendo un cálculo de kilos por hectáreas también puede ser tres veces más rápido”, añadió.

• El sector ovino está desarrollando las primeras conversaciones para explorar la operativa y los requerimientos del trabajo con frigoríficos.
• Se trabaja en un proyecto que utilice como estrategia la importación para posterior exportación de carne al gancho.
• El sector ovino ha logrado grandes conquistas en el rubro, sobre todo en lo referente a la genética.

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El director ejecutivo de la Mesa Paraguaya de Carne Sostenible (MPCS), Hugo Sánchez, compartió su pensamiento respecto al contexto generado en torno a las exigencias de la Unión Europea (UE), que habla acerca del origen de los productos a ser introducidos a los distintos mercados del bloque.

Señaló que, por un lado, el país debe generar las condiciones y reforzar la institucionalidad de modo de salvaguardar la soberanía nacional, y, por otro lado, el mismo sector productivo debería adecuarse progresivamente a los requisitos internacionales para seguir ganando terreno.

Respetar las instituciones públicas es la base de todo, ese es el primer paso que se debe cumplir y no perder la soberanía, dijo.

“Posteriormente debe darse el trabajo interno de organizar mejor la respuesta ante estos ‘requisitos’, prefiero llamarlo así, porque así lo va a exigir el mercado global. Debemos estar preparados para venderle carne a cualquier mercado y ante cualquier requisito”, expresó.

MEJORAR SISTEMA DE TRAZABILIDAD

Lo expuesto fue en entrevista con el diario La Nación/Nación Media, para conocer la postura de la MPCS, en relación con los requisitos de origen de la UE, que bajo acuerdo quiere prohibir la comercialización en el bloque de materias primas y productos derivados asociados a la deforestación y degradación ambiental.

Sobre estos “requisitos”, Sánchez mencionó que todavía siguen en estudio, pues no se pueden cumplirlos de forma inmediata, al tiempo de acentuar que como país “hay que prepararse”, porque en algún momento dado el consumidor global va a querer saber de dónde vienen la carne que come y cómo fueron alimentados los animales.

Es así que para el director de la MPCS es importante también la autocrítica, y entender acerca de la necesidad del sector de mejorar los sistemas de información y respaldo de documentos que puedan acreditar la trazabilidad de los productos.

TRATAR POSIBLES SOLUCIONES

Estos temas fueron abordados en un reciente evento de la MPCS, cuyo foco estuvo previsto desde antes que iniciaran los cuestionamientos al acuerdo pretendido por la UE, por lo que como gremio consideran que estos aspectos deben ser tratados para plantear posibles soluciones.

Justamente, en el reciente Hackathon de Ganadería Sostenible surgieron algunas ideas como planteamientos, las cuales pueden aportar como alternativas relacionadas a los sistemas de información, tanto en las instituciones públicas como sector privado, para obtener mayor fortaleza de la trazabilidad, acotó.

CLAVES

1- Paraguay ante todo debe defender el respeto a las instituciones públicas y la soberanía nacional respecto a los requisitos de la UE.

2- Internamente hay que prepararse para mejorar respuestas con un sistema que acredite la trazabilidad.

3- El sector privado también debe adaptarse a los requerimientos globales del mercado, pues el propio consumidor es el que exigirá.

El economista y exviceministro de Economía del Ministerio de Hacienda (2008), Manuel Alarcón, sostuvo que este 2024 serán tres los rubros que tendrán un gran crecimiento, según las proyecciones del Banco Central del Paraguay (BCP) y su propio análisis.

En contacto con La Nación/Nación Media, Alarcón mencionó que la producción de soja, carne y el sector de la construcción tendrán un gran año, explicado por diversos factores. Sobre el complejo soja, explicó que entendiendo que el modelo de producción de Paraguay está sostenido por el sector agropecuario, por las lluvias registradas en las últimas semanas y los altos niveles de precios de nuestras principales commodities, la soja se destacará en gran manera este 2024.

Respecto a la carne, dijo que, como valor agregado, se encuentran los envíos de carne a los Estados Unidos, que, si bien son exportaciones mínimas de sólo 10.000 toneladas por año, la reapertura a ese mercado es una puerta abierta a otros. “Se espera que continúen las exportaciones a Taiwán y el desafío no menor será recuperar los mercados históricos de Paraguay, como es el caso de Chile”, acotó.

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Acerca del rubro vial, señaló que luego de casi dos años de falta de liquidez por la deuda que la exadministración acumuló, la construcción perdió su dinamismo económico. Sin embargo, por el compromiso obligado del nuevo gobierno, el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (Mopc) ya saldó aproximadamente el 90 % de las deudas que tenía con las empresas constructoras, unos USD 330 millones, y que con estos se espera un 2024 con mayor movimiento como ha caracterizado a las obras públicas.

“Para el 2024 se espera una recuperación del sector construcción, producto de la cuasi cancelación de las deudas con las empresas vialeras responsables de varias de las principales obras de infraestructura para nuestro país”, manifestó. En resumen, se espera un muy buen año 2024 para el complejo de la soja, la carne y el sector construcción, especialmente por las obras públicas, resaltó.

Manuel Alarcón también habló sobre la necesidad que tiene el gobierno de definir un modelo de crecimiento de mediano y largo plazo, de manera que los agentes económicos generadores de riqueza puedan internalizar y contar con un modelo no solo de crecimiento, sino de desarrollo económico.

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Luego de concretarse los primeros envíos de carne bovina paraguaya a los Estados Unidos durante los últimos días de diciembre de 2023, Paraguay ahora en 2024 deberá enfocarse para ganar la confianza de este mercado, así como en las nuevas auditorías que están en espera para nuevas habilitaciones.

Es lo que mencionó el presidente del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), José Carlos Martin, en contacto con el diario La Nación/ Nación Media, respecto a las proyecciones para este nuevo año, tras la leve disminución que se dio en 2023 con 315.521 toneladas de carne exportadas. “Lo que Paraguay debe hacer ahora es enfocarse en Estados Unidos, afianzar lo que se logró y pensar en estos 6 a 7 meses próximos como una curva de aprendizaje para mantenernos. Mercados ya se tienen suficientes, hay 80 habilitados de los cuales a 52 enviamos en 2023, pero el desafío siempre es mantener los habilitados”, expresó.

LOGRO QUE SE DEBE CUIDAR

Indicó que al cierre del reciente año se concretaron 7 exportaciones con 75.000 kilogramos de carne vacuna a Estados Unidos en la última semana de diciembre. De ahora en más se tendrá que fortalecer lo que se vino realizando, ya que todavía no exportaron todos los frigoríficos habilitados, además de las cuestiones logísticas. Martin aseveró que el 2023 fue un gran año dentro de todo, aunque se esperaban mayores números de exportación que fueron contrarrestados por una producción y faena apretadas por atravesar un cierto periodo de sequía. No obstante, destacó el logro de la reapertura del mercado americano y los resultados aprobados en las recomendaciones de la auditoría de Canadá.

Respecto al ingreso a este mercado, el titular del servicio veterinario oficial explicó que se estaría negociando las fechas de vacunación, pues este año el primer periodo antiaftosa comenzará un mes atrasado a pedido de los productores. Consideró igualmente que los primeros embarques rumbo a Canadá se podrían dar entre abril y mayo de este año.

Con relación a los demás mercados con los cuales se iniciaron las conversaciones, señaló que con México se está tramitando lograr la auditoría, así como con Corea del Sur. En el caso de Singapur, sí está más avanzado, aunque se deben conseguir las inspecciones.

El presidente del Senacsa destacó a la vez al sector privado que sigue apuntando a nuevos desafíos, a mercados y a posicionarse para estar en la élite del consumo mundial de la proteína roja, permitiéndose cambiar e innovar en procesos cuando lo sea necesario.

Esto también acompañado de la gestión y el trabajo del capital humano de la institución, que viene implementando una planificación mensual e incluso semestral ya de cara al 2025, acompañado del factor presupuestario con lo que se pudo materializar y ejecutar incluso un 80 % de los recursos destinados.