Miguel Mora, eco­nomista jefe del Banco Central del Paraguay (BCP), indicó que la balanza comercial para el 2023 podría revertir su saldo deficitario del 2022 tras la importante recuperación que se espera tenga el sector agrí­cola. Las previsiones apuntan a un superávit de unos US$ 820 millones, lo que repre­sentaría el 1,9% del producto interno bruto.

El 2022 fue un año bastante negativo para la balanza comercial. Las salidas de divisas fueron superiores desde el segundo semes­tre del año ante una caída importante en el sector agrí­cola, ocasionada por una his­tórica sequía que afectó las exportaciones de granos y sus derivados en todo el período mencionado.

El saldo deficitario del año alcanzó los US$ 1.316 millo­nes, alcanzando un nivel histórico no observado en los últimos 35 años en la his­toria comercial en el país. Al parecer, ese escenario podría registrar un cambio importante durante este año, debido a que se estima una recuperación importante en el sector agrícola que impul­saría de nuevo las exportacio­nes y, por ende, el ingreso de divisas al país.

En ese sentido, Mora señaló que para el 2023 las previsio­nes apuntan a que la balanza comercial podría revertir su saldo negativo con estima­ciones bastante esperanza­doras. Y es que la estimación apunta a que nuestro país podría registrar un superávit en torno a los US$ 820 millo­nes, lo que representaría el 1,9% del PIB.

“En cuanto a las exporta­ciones, estamos previendo una recuperación, prin­cipalmente pensando en una producción de soja que recuperaría los nive­les de años anteriores tras la sequía que afectó fuer­temente este cultivo. Con­siderando los otros rubros, estamos teniendo una pro­yección del 16%; y para el caso de las importacio­nes, aproximadamente un 9,6%”, dijo el especialista.

Indicó que las previsio­nes son en conjunto con las demás partidas de las cuen­tas corrientes, los demás referentes de la balanza de servicio y también otros tipos de ingresos para el país. Mora mencionó que estos resultados podrían verse en el segundo trimestre del año, encaminándose a las proyec­ciones que están teniendo.

En cuanto al 2022, el economista jefe del BCP explicó que desde el segundo semestre, a partir de junio, la balanza comercial empezó a tener un saldo deficitario mensual de US$ 165 millones. Indicó que este panorama incidió en una mayor demanda de dólares ante el menor ingreso en el país, lo que provocó una mayor presión sobre el tipo de cambio.

No obstante, indicó que hubo un mayor ingreso en algunos rubros agrícolas como la zafra, y principal­mente el maíz, que colaboró con un gran porcentaje ante una cosecha récord y un abultado volumen de envíos. Estos sectores aportaron a atenuar el complicado panorama de las exportaciones, pero no bastó para reducir el saldo negativo en la balanza comercial.