En el contexto de las medidas sanitarias adoptadas para miti­gar los efectos del covid-19, el indicador de ventas registró en abril la caída interanual más importante desde su publicación, según el Banco Central del Paraguay (BCP). Datos preliminares indi­can que el Estimador Cifras de Negocios (ECN) registró una variación interanual de -19,9%, acumulando así en el año -2,8%. El promedio móvil de tres meses reflejó una variación interanual de -4,8%. Se encuentra explicado por los resultados adversos en las ventas de los sectores manufacturero, comercio y servicios, justamente los 3 rubros más afectados por esta pandemia tras la cuarentena en el país.

En la industria manufactu­rera, los sectores cuyas ventas se vieron más afectadas fue­ron textiles, cuero, metales comunes, productos metáli­cos, bebidas y tabaco, madera, papel y minerales no metá­licos. No obstante, se vieron comportamientos favora­bles en las ventas de algunas industrias elaboradoras de alimentos, tales como moli­nería y panadería, y azúcar.

En cuanto al comercio, todas sus ramas registraron varia­ciones negativas, destacán­dose las retracciones en las ventas de vehículos, combus­tibles, prendas de vestir y pro­ductos para el equipamiento del hogar, según el reporte. Entre los servicios, el único sector que creció fue el de las telecomunicaciones, en tanto que las ventas de hote­les y restaurantes, servicios a los hogares, servicios a las empresas y de transporte, presentaron comportamien­tos desfavorables.

Esto coincide con los datos de actividad mensual, divulga­dos recientemente por el BCP. La actividad económica mos­tró en abril pasado la mayor caída registrada, que va en línea con la crisis registrada en el país por la pandemia. El Indicador Mensual de Activi­dad Económica registró una variación de -12,2% frente al mismo mes del 2019. Con este resultado, la actividad acu­mulada registra una varia­ción de -0,2% a abril del 2020.

En el comportamiento inte­ranual del mes incidieron los desempeños negativos regis­trados en servicios, la indus­tria manufacturera, la gene­ración de energía eléctrica, la construcción y la ganadería. Pero el resultado positivo de la agricultura (por un efecto rebote de la soja) ayudó a ate­nuar la caída de la actividad económica. Según especialis­tas, ahora se sabe el pozo de la crisis en el país, pues abril fue crucial para saber el impacto económico de la paralización por el covid-19, por lo que lle­varán a los agentes económi­cos e instituciones a recalcu­lar sus proyecciones para el 2020.

Si se toma bien las medidas, entre 18 a 24 meses Paraguay podría estar en sus niveles normales, que se tenía en enero de este año, antes de la pandemia, dijo el economista Santiago Peña. Agregó que hoy en el mercado local no se ven los golpes económicos que trae consigo la pandemia. “Las consecuencias todavía vamos a ver, no hay que ser fatalista ni tampoco subestimar los golpes de esta enfermedad”, añadió.

El ex ministro de Hacienda dijo que indudablemente la actividad económica caerá a causa de la pandemia, pero no se sabe qué tanto. Agregó que el Paraguay tiene ventajas ante otros países, pues casi el 50% de la economía se basa en los envíos de alimen­tos y los precios de los commodities no sufrieron caída grande a nivel mundial.