El conflicto de la hidrovía Paraguay-Paraná, en el que Argentina exige el cobro de un peaje ilegal de USD 1,47 por cada tonelada de carga a las embarcaciones que naveguen por el tramo Confluencia- Santa Fe, aguas de su territorio, ya habría generado solo a Paraguay facturas estimadas en USD 15 millones.

Es lo que evaluó el directivo del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos (Cafym), Juan Carlos Muñoz, en contacto con el diario La Nación/ Nación Media, con relación a los sobrecostos que ocasiona el cobro del peaje impuesto unilateralmente por el vecino país.

“Un monto exacto no manejamos ahora, pero podemos estimar porque solo al 19 de mayo tenemos información extraoficial de que habían facturado por unos USD 11 millones a las navieras paraguayas. Después se dieron los casos de las interdicciones y ahora ya setiembre, teniendo en cuenta que las barcazas no paran, podríamos estimar unos USD 15 millones”, expresó Muñoz.

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El más reciente caso de interdicción, la empresa tuvo que abonar más de USD 27.000, y lo hizo bajo proceso judicial, por lo que liberaron la barcaza en 3 días. Foto: Gentileza

Barcazas retenidas

El referente del sector recordó que Argentina empezó a emitir facturas en concepto de peaje desde el 10 de marzo, pero las empresas lo que hacían era rechazar estas facturas a los agentes marítimos en Buenos Aires u otras localidades mediante acciones judiciales.

La primera interdicción se dio el 28 de julio al remolcador HB Grus, de bandera paraguaya, que también se intentó aplicar al HB Phoenix, de bandera boliviana, ambas pertenecientes a la naviera brasileña Hidrovías do Brasil (HB), por considerarlo deudor de la polémica tarifa de peaje impuesta por la Administración General de Puertos (AGP) de la Argentina.

El segundo y más reciente caso fue a la firma Mercurio Group, con el embargo de la barcaza MGT-05, con 3,2 millones de litros de combustibles, que tuvo que pagar más de USD 27.000 e impuestos para aguardar la libración al tercer día; esta naviera informó que tiene facturas acumuladas por USD 210.000. La diferencia entre ambos es que la firma brasileña HB abonó sin reserva a la AGP, mientras que la nacional lo hizo vía judicial y bajo protesta, explicó Muñoz.

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