El representante de los camioneros de Tobatí, Darío Toñánez, indicó que hay una mala gestión en Petropar y por ese motivo el presidente de la institución, Denis Lichi, se niega a reducir el precio del combustible. Desde este sector afirman que haciendo algunas modificaciones en la estructura de costos, la petrolera estatal estará en condiciones de dar cumplimiento al pedido.

“Lichi está mintiendo, sus operadores están pidiendo su cabeza y él sigue dando vueltas al tema, yo creo que le está informando mal al presidente de la República de los movimientos en Petropar”, aseveró. El vocero de los camioneros señaló que continuarán con las movilizaciones porque están seguros de que se puede reducir el precio del combustible.

Los camioneros solicitan una disminución de G. 1.500 por litro. “No sé si puede llegar a los G. 1.500, pero algo se puede bajar, estamos convencidos, sabemos que eso es así”, expresó Toñánez este martes en conversación con la 1080 AM. Mencionó que no solo este sector es el que está disconforme con la administración de Lichi al frente de Petropar, sino también todos los funcionarios de la empresa estatal, quienes exigen que renuncie a su cargo.

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El presidente de Petróleos Paraguayos (Petropar) es muy cuestionado por todos los sectores, incluso por legisladores, por indicios de corrupción en su gestión y por estar abocado en su campaña proselitista con miras a las elecciones generales del próximo año.

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Así también, Toñánez sostuvo que el gobierno de Mario Abdo Benítez incumplió con otras promesas, tales como el desembolso de US$ 28 millones para la construcción de viviendas sociales, lo que hubiese permitido dinamizar la economía en Central, puesto que este tipo de proyectos son los que generan fuentes de trabajo. El representante de los camioneros mencionó que desde el Ministerio de Hacienda habían prometido este desembolso, que supuestamente iba a darse a partir del 15 de julio; sin embargo, esto no ocurrió.

“Muchos de los camioneros de Central nos mantenemos muy ocupados cuando hay construcción de esas casas, todo el mundo trabaja, eso sí realmente oxigena. Nosotros nos damos cuenta que no hay voluntad para solucionar esto, ya hubiesen liberado esos US$ 28 millones para obras y ya estaríamos todos trabajando, aunque el gasoil esté con este precio”, lamentó Toñánez.

Los camioneros reanudaron las movilizaciones tras el incumplimiento de las promesas por parte del Gobierno, que había asumido el compromiso de reducir el precio del combustible G. 700 por litro para el sector, así como también para otros rubros de conductores; sin embargo, este beneficio no alcanzó a todos, motivo por el que se encuentran movilizados en varios puntos del país con cierres intermitentes de rutas.

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