El sector industrial de la carne espera reportar un notable crecimiento teniendo en cuenta el posible aumento en número de los frigoríficos que iniciarían operaciones entre este año y el próximo en el territorio nacional. Sin embargo, según el doctor José Carlos Martin Camperchioli, presidente del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), esa situación no es acompañada por el hato ganadero que se encuentra estancado desde hace cinco años.

Desde la Cámara de la Carne habían expresado su preocupación por la disminución del hato ganadero debido a que se da cada año, por lo que consideran oportuno llevar adelante acciones en forma conjunta con los demás gremios a fin de diseñar estrategias para revertir esa situación. Sobre este punto, el presidente del servicio sanitario de nuestro país, doctor José Carlos Martin Camperchioli, señaló a La Nación/Nación Media que este año se dio una disminución del 2,3% en la población ganadera del país lo que representa unas 310.000 cabezas menos en comparación con el año anterior. Refirió que el hato ganadero se estancó desde hace cinco años y pese a que suele recuperar, vuelve a una tendencia a la baja.

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Desde Senacsa sostienen que ninguna señal de intervencionismo para aumentar la población ganadera en el país es buena. Foto: Archivo.

“Esto es producto de un aumento importante en la cabeza faenada. El hato ganadero está estancado hace cinco años, hay años que crece uno o dos por cientos y después viene una faena más grande y hay una disminución. Pero esto no afecta en absolutamente nada al sector, es un sistema que automáticamente producto de la oferta y la demanda se autorregula solo”, indicó.

Para Martin la disminución no es muy grande por lo que no se espera impactos en el sector debido a que tampoco se da la baja de manera consecutiva en grandes cantidades. Explicó que la capacidad de extracción, que tiene que ver con la cantidad de animales faenados sobre el hato, sigue siendo muy baja comparado con otros países pero agregó que nuestra capacidad de conversión que significa la eficiencia reproductiva, también sigue siendo bastante baja.

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“La preocupación de la Cámara Nacional de Carne se da porque si bien hay una disminución de stock, ellos están preocupados porque no aumenta el hato ganadero y se están abriendo nuevas fábricas. Tenemos tres fábricas que se inauguran, entonces el hato ganadero tarda su tiempo y obviamente vamos a tener más frigoríficos. El aumento de la capacidad frigorífica no está acompañando al aumento del hato ganadero”, agregó.

Sobre las intenciones del sector de trabajar sobre estrategias para intervenir en el hato ganadero, dijo que no es conveniente debido a que a la larga no es buena. Subrayó que la mejor salida es potenciar el sector con medidas de créditos que podrían generar más oportunidades para que aumente la población ganadera en el país.

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