El sector avícola no está exento de los golpes del contrabando. El ingreso de carne aviar de manera ilegal a Paraguay, tanto desde Brasil como de Argentina, genera una competencia desleal al productor local, afirmó Ceferino Méndez, presidente de la Asociación Paraguaya de Productores y Exportadores de Pollos (Appep).

En conversación con La Nación, el representante del sector afirmó que el contrabando de carne aviar actualmente “goza de muy buena salud”, e inclusive aumentó durante la pandemia del COVID-19. En ese sentido, advirtió que hasta la carne vacuna está ingresando de manera ilegal al país desde Argentina.

El contrabando de productos desde los países vecinos se da por dos factores principales, según Méndez, uno por la devaluación de las monedas (peso y real) de Argentina y Brasil, que hace que al paraguayo le sea más barato ir a comprar de estos países, y otro por la vulnerabilidad de los controles en las fronteras. “Siempre estamos insistiendo (al Gobierno) sobre eso y solicitando igualdad de condiciones para todos”, dijo.

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Mayor promoción

En el mismo contexto, el titular de la Appep reiteró la necesidad de aumentar la promoción de la carne aviar paraguaya y buscar la apertura de nuevos mercados para este producto. “El apoyo que podemos recibir del Gobierno es que se pueda salir afuera con mayores volúmenes, ya que al aumentar las exportaciones, mayor será el beneficio para el productor”, insistió.

Méndez agregó además que lo ideal sería promover la carne aviar en el exterior, así como en algún momento se hizo con la carne vacuna. “Celebramos que la carne porcina actualmente esté ganando mercado, ojalá que nosotros también podamos despegar con las exportaciones”, expresó.

Datos sobre exportación de productos avícolas a mayo del 2021. Foto: Gentileza.

En los primeros cinco meses del 2021, el Paraguay llegó a exportar 1.278 toneladas de carne aviar por US$ 1,4 millones. Asimismo, se enviaron al exterior 61 toneladas de menudencias de pollo, por US$ 54.819, y 1.710 toneladas de despojo por US$ 835.087, según el reporte del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa). Los principales mercados de esta proteína son Rusia, Mozambique, Bahamas, Angola y otros.

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