A tres años del homicidio de Fernando Báez Sosa a causa de una brutal agresión que recibió por parte de un grupo de rugbiers a la salida del boliche Le Brique de Villa Gesell, se desarrolla en Argentina el juicio de ocho imputados. El padre del joven que tenía 18 años, Silvino Báez, aseguró que la única víctima del caso es su hijo al referirse sobre la declaración de los padres de los procesados, este martes pasado, quienes se victimizaron y alegaron que viven “una pesadilla” desde el 2020.

“Se anotó para donar sus órganos antes de terminar la secundaria, pero por las patadas y los golpes que recibió Fernando no pudo donar ni sus órganos, así que acá la víctima es Fernando y nadie más”, aseveró Silvino Báez en declaraciones ante la prensa argentina.

“Para la Justicia no sé qué será, pero a mí no me causó nada”, expresó Silvino sobre los testimonios de los padres de los acusados, que también fueron tomados como una victimización por parte del abogado Fernando Burlando, representante de la familia Báez Sosa. A través de sus redes sociales, Burlando manifestó que le causaron “vergüenza y bronca” las declaraciones de los familiares de los rugbiers, dado que en ningún momento “se compadecen del dolor que viven Graciela y Silvino”.

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La madre de Fernando, Graciela Sosa, también comentó a la la prensa argentina que el juicio le hace revivir una y otra vez lo vivido aquel 18 de enero del 2020, día en que su hijo perdió la vida: “Para mí la única víctima es Fernando”, y agregó: “A Fernando lo asesinaron de la manera más cruel, yo solo espero justicia por mi hijo, hicimos este viaje en busca de justicia”.

Graciela indicó que hasta el momento ninguno de los padres de los imputados se acercó a ellos y que no han pedido perdón por lo cometido por sus hijos; no obstante, afirmó que prefiere que se mantenga la distancia. “Preferimos estar lejos de ellos, qué van a decirnos, con que nos pidan perdón no nos devuelven a nuestro hijo, nosotros queremos estar tranquilos”, aseguró.

Organizan colecta

La madre de Fernando manifestó que buscan transformar el dolor en algo positivo, e instó a la ciudadanía argentina a unirse a la colecta de víveres y útiles escolares prevista para este miércoles 18 a las 19:00 en el anfiteatro de Dolores, donde estará presente el obispo de Mar del Plata que dirigirá una oración interreligiosa pidiendo por el alma de Fernando y exigiendo justicia.

El colegio Marianista, instituto del barrio Caballito de Buenos Aires donde Fernando Báez fue alumno también, organiza la misma colecta y todo lo donado será distribuido en los lugares que elijan Graciela Sosa y Silvino Báez.

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“Aquí la única víctima se llama Fernando José Báez Sosa que decidió ir de viaje a pasar sus vacaciones y me lo devolvieron en un cajón cerrado, le rompieron la cabeza de tantos golpes y patadas que le dieron”, concluyó Graciela, quien ya no pudo seguir dando declaraciones por estar conmovida por todo lo ocurrido.

Las declaraciones de los padres de los rugbiers estuvieron en la misma línea, alegando que han perdido sus trabajos, que viven una pesadilla, que no pueden salir a las calles sin ser escrachados, que reciben amenazas y temen por la integridad de sus hijos.

Los imputados por este homicidio son: Máximo Thomsen, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Blas Cinalli, Ayrton Viollaz, Luciano, Ciro y Lucas Pertossi, quienes se exponen a la pena máxima permitida en la justicia argentina; es decir, la cadena perpetua. El veredicto del tribunal de Dolores, de la provincia de Buenos Aires, se dará a conocer el próximo 31 de enero.

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