China reportó el domingo 13.146 casos locales de COVID-19, la cifra más alta en dos años, mientras la contagiosa variante ómicron se propaga por el país, informó la Comisión Nacional de Salud (CNS).

“Hubo 1.455 pacientes con síntomas (...) 11.691 casos asintomáticos (...) y ninguna muerte reportada”, señaló la CNS china en un comunicado.

En el centro financiero de Shanghái, epicentro del brote más severo del coronavirus del país, casi todos sus 25 millones de habitantes se encontraban el sábado bajo confinamiento, en un esfuerzo por contener la propagación.

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Las restricciones en Shanghái amenazan con afectar la cadena de abastecimiento. El gigante naval Maersk dijo el viernes que algunos depósitos de la ciudad permanecen cerrados y los servicios de camiones podrían verse golpeados por el confinamiento.

China, donde primero se detectó el coronavirus en el 2019, es uno de los últimos países que sigue una política de cero COVID, con estrictas medidas restrictivas para erradicar hasta el mínimo brote.

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Fuente: AFP.