Rebeca Vázquez, rebeca.vazquez@nacionmedia.com - Fotos: Eduardo Velázquez y gentileza Pope Spinzi

El conductor de “Noche de Furia” –el exitoso programa de entretenimiento que va por el canal GEN de Nación Media– descubrió su faceta como papá a los 31 años, cuando se enteró junto a su esposa Rocío Bastos que estaban en la dulce espera de su primera bebé: Catalina. A nueve años de recibir la gran noticia, hoy con 40 años, Pope Spinzi recordó con el humor ácido que lo caracteriza cómo se enteró de que se convertiría en papá por primera vez.

“Nosotros nos casamos en 2014. Tras casi un año de casados, mi señora me comentó que tenía síntomas de embarazo una noche. Tuvimos la idea de salir para que ella tome su ‘última copa de vino’.

Al final, ella no tomó nada y yo terminé con las dos botellas. Al día siguiente, a las 5 de la mañana ya fuimos al hospital para hacer el examen médico correspondiente. Fue así que nos enteramos que Catalina estaba en camino”, mencionó.

Con el paso del tiempo, el comunicador y su esposa fueron agrandando su familia y hoy disfrutan de sus tres niñas: Catalina (7), Julieta (6) y Guillermina (3), sus mayores orgullos. Las pequeñas son protagonistas de simpáticas escenas de la vida cotidiana que Pope comparte habitualmente en redes sociales. La abuela paterna de las niñas, la querida Chanchu, también se suma oportunamente a estos clips y ya se ha ganado el cariño de los miles de seguidores del carismático comunicador.

Casado desde hace casi 10 años con Rocío Bastos, el conductor de radio y televisión siempre cuenta en sus programas que ya de adulto pudo conocer a su progenitor. “El no saber nada de esa persona me impulsó a creer que, cuando tuviera hijos, haría todo lo posible para estar lo más presente”, expresa

MÁS ALLÁ DE LA DIVERSIÓN

Según comentó el conductor de radio y TV, aunque siempre se muestra como el “papá divertido” en redes sociales, también busca inculcar disciplina a sus pequeñas, por lo que no duda en intervenir con alguna llamada de atención cuando la situación lo requiere. No obstante, casi la mayor parte del tiempo es el encargado de “velar” por la distracción y el esparcimiento de sus pequeñas.

“Soy un 70 % como soy en las redes, pero un 30 % también ‘pire vai’. Cuando no quieren dormir o no comen ni la mitad, me obligan a intervenir. Más allá de eso, desarrollar su parte física en el sentido de acompañar a que se trepen y todas esas cosas peligrosas siempre está a mi cargo”, agregó.

En medio de lo desafiante que puede resultar la crianza de los hijos, el también actor y deportista (cultiva el jiu-jitsu) reflexionó amorosamente sobre el gran cambio que experimentó desde que se convirtió en papá y se refirió a sus tres pequeñas como los grandes motores de su vida.

“Ser papá me dio otro significado. Es muy loco. Antes de convertirme en papá, lo que venía persiguiendo durante todo ese tiempo no se me daba y, después, mágicamente se me empezaron a abrir las puertas tanto en radio, televisión y las redes, donde compartir parte de esta rutina me dio otro ‘approach’ (acercamiento) con la gente”, refirió.

Julio César “Pope” Spinzi dice que sus hijas Catalina (7), Julieta (6) y Guillermina (3) son sus motores, su cable a tierra, quienes le motivan a ser cada día mejor persona

CICATRICES DEL PASADO

Pope Spinzi abrió su corazón y compartió además otro de los aspectos que marcó, de cierta forma, su rol como papá: la ausencia en su vida de una figura paterna. “El no saber nada de esa persona me impulsó a creer que, cuando tuviera hijos, haría todo lo posible para estar lo más presente, en todos los momentos de la vida de mis hijas. Al punto de que, cuando toca hacer sacrificios, no dudo en hacerlos. Por ejemplo, dejé el teatro para poder estar con ellas. Ahora empiezo a retomarlo, cuando ya están grandes”, comentó.

El conductor de radio y televisión aseguró que, aunque no tuvo la oportunidad de criarse junto a su papá, no le guarda ningún tipo de rencor. Según comentó, ya durante su adultez, pudo conocer a su padre y cerrar así un ciclo “muy importante” en su vida.

“Viajé a Nueva York y fue ahí donde lo conocí. Nos encontramos y nos abrazamos. En ese momento le agradecí porque, al conocerlo, cerré una etapa que no sé qué era de mi vida. Como le dije en una carta, para mí no es esa figura paterna como tal, pero le agradecí que haya tenido la valentía de enfrentar la situación.

Me encontró a mí, una persona que no tenía resentimientos, gracias a que mi mamá nunca me cargó con eso”, destacó.

FUERZA Y AUTOESTIMA

Al igual que muchos padres, Pope Spinzi desea ver en un futuro a sus hijas realizadas, viviendo el sueño que cada una eligió para sus vidas. “Quiero que tengan la fuerza y la autoestima para poder enfrentar cualquier situación. Por eso, estamos trabajando ahora en inculcarles las herramientas necesarias para que puedan enfrentar cualquier situación. Deseamos que tengan la mentalidad de que hagan lo que realmente sientan, más allá del compromiso”, expresó.

La llegada de su primera hija, Catalina, significó un cambio radical en la vida del también actor y atleta de jiu jitsu

DESAFÍOS DE LA PATERNIDAD MODERNA

En plena era digital, Pope Spinzi analizó que la crianza de los hijos se vuelve aún más compleja y puntualizó que, en medio de las rutinas tan vertiginosas de los padres, uno de los desafíos actuales de la paternidad es “priorizar” todo lo relacionado a los hijos.

“Si vas a tener un hijo, tenés que saber que tu hijo va a estar primero siempre. La prioridad pasa a ser eso. En mi caso, disfruto de que sea así y no tengo problemas en perderme algún cumpleaños o momentos importantes con los amigos, porque los amigos más adelante van a seguir ahí”, explicó.

En esta misma línea, el famoso reflexionó respecto a que la “calidad” y la “cantidad” de momentos que se puedan tener para compartir con los hijos son igual de importantes. Entre otros desafíos, especificó que muchas veces se vuelve complejo poner límites a los pequeños en la utilización de aparatos electrónicos.

“Es todo un desafío poder combatir contra la pantalla y poner horarios, hacerte fuerte y darles actividades y estar presentes en esas actividades, ya sea para llevarles, buscarles o acompañarles. Todos estos retos de la crianza actual hacen que se convierta en un compromiso mayor”, resaltó.

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