La fiscala Ana Girala mencionó que en el Código Penal no existe una figura que tipifique el desvío de barrera y aseguró que el hecho no está penado. Sin embargo, dijo que analizarán el actuar de Ricardo Riquelme, padre del niño baleado por dos policías el sábado por la noche.
Sobre ese punto, la agente fiscal manifestó que otra situación hubiese sido si Riquelme atropellaba la barrera o se negaba a detener la marcha.
“Otra situación hubiese sido si pasaba por la barrera, se negaba, se resistía o atropellaba la barrera, si ocasionaba alguna lesión a los intervinientes. Pero el hecho de desviar no está penado”, expresó Girala en contacto con 1000 AM.
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Sin embargo, la profesional detalló que el desvío desencadenó que los oficiales inicien una persecución. En cuanto al hecho punible sobre Riquelme, sostuvo que no descarta analizar la actuación del padre por intervenciones peligrosas o violación del deber del cuidado en el trayecto.
Caso “gatillo fácil”
El caso involucra a los policías identificados como Derlis Sanabria y Juan Amarilla, quienes fueron imputados por los hechos punibles de homicidio doloso en grado de tentativa, omisión de auxilio y lesión corporal en el ejercicio de funciones públicas por la fiscala interviniente Ana Girala.
Cabe recordar que el sábado por la noche, Riquelme desvió una barrera policial en la ciudad de San Lorenzo. A consecuencia de eso, se inició una persecución.
“El hecho se inició en una barrera en la ciudad de San Lorenzo y culminó en Luque. Ahí sí tenemos identificado al que realizó disparos y es Derlis Sanabria, que es el acompañante del rodado”, indicó la fiscala.
Los policías efectuaron varios disparos por el rodado de Riquelme, quien iba acompañado por su esposa y sus dos hijos, uno de ellos, de 6 años, acusó 3 impactos de bala y la mamá tuvo un refilón a la altura del hombro.
Girala dijo que el padre del niño argumentó que no detuvo la marcha de su vehículo, ya que supuestamente desde que empezó la persecución los policías disparaban directamente hacia el auto. “Solamente con un circuito cerrado o al tener la versión también de testigos o de otras personas podríamos corroborar esa circunstancia”, afirmó.
La fiscala solicitó prisión preventiva para ambos agentes, quienes se exponen a 30 años de pena.
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