La pandemia interminable sigue su curso y preocupa porque hubo más de 1.300 casos en la semana 48 del año. La llegada de las fiestas motivó a las autoridades de salud a incrementar los mensajes instando a la vacunación y al uso responsable de tapabocas. Desde que se detectó por primera vez en China a fines del 2019, el covid mató a más de 6,6 millones de personas en todo el mundo.

Crece el número de con­tagios y de hospitali­zaciones. “Realmente tenemos casos en aumento, más bien del personal de salud”, cuenta Rebeca Gue­rín, jefa de control de Infec­ciones del Hospital de Clíni­cas.

“Son casos leves por el momento que no requirieron internación, pero nos esta­mos dando cuenta de que por semana epidemiológica están aumentando, lo que se refleja igualmente a nivel país. Tam­bién tenemos un aumento de consultas de cuadros respira­torios en pediatría y tenemos un aumento en las consultas ambulatorias, tanto en adul­tos como en pediatría, pero tenemos un solo paciente internado con covid, actual­mente en contingencias adul­tos y no hay casos en pedia­tría”, comentó a mediados de la semana que termina.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Para el director del Instituto de Enfermedades Respirato­rias y del Ambiente (Ineram), Felipe González, la situación está controlada. “No tenemos demasiados casos de interna­ción. Hay sí un aumento de contagios, pero hay un buen porcentaje de inmunizados aquí en la capital y Central, no así en el interior, donde las inmunizaciones fueron bajas y no se llega al 30% de las per­sonas”, expuso.

Pidió estar alertas durante estas fiestas de fin de año y en los viajes al exterior, que pue­den ser importantes momen­tos de contagio en el verano.

Entiende también que la capacidad de respuesta del sistema de salud “se ha ampliado, los colegas están compenetrados y el manejo es más ambulatorio, no estamos tan exigidos”, indicó. “Quiero insistir en la inmunización, porque las vacunas son las que ayudan a atenuar este tipo de casos. Está más que demostrado que en quienes han recibido más de una dosis la atenuación de los casos es manifiesta. Permite que ten­gamos una vida normal y no llegar a los niveles de hace dos años”, explicó.

MAPA DEL VIRUS

Asunción y Central concen­tran la mayor cantidad de casos de covid-19. La capital con nivel 3 (alerta naranja) y el departamento que concen­tra el área urbana más grande del país tiene nivel 2 (alerta amarilla) de transmisión comunitaria, que se mide en una escala donde el rojo ya es el nivel 4. En Ciudad del Este y otras poblaciones de Alto Paraná se tiene un nivel 2 de transmisión del virus y por fortuna en el resto del país los números son muy bajos todavía.

Igualmente, la cantidad de contagios, más de 1.300 en la segunda semana de diciem­bre, motivó a las autoridades a pedir que no se peregrine a Caacupé con síntomas de cuadros respiratorios.

Se recomendó también usar responsablemente el tapabo­cas en espacios cerrados sin ventilación, pero no así en los lugares al aire libre. Las auto­ridades también requirieron que se repose en caso de pre­sentar cuadros respiratorios, no dejar de consultar en un centro asistencial y atender los protocolos, el lavado de manos, el rociado con alco­hol, etc.

RECOMENDACIONES

La recomendación de venti­lar el ambiente, aunque esté el aire acondicionado pren­dido, es otro elemento impor­tante, sobre todo ante las fies­tas de fin de año.

Al respecto, Guerín comentó: “Hemos sacado una circular donde solici­tamos nuevamente el uso de mascarilla por parte de todo el personal de salud, tanto de familiares y pacientes que no tengan contraindica­ción. Ante este aumento de casos, también promovemos completar la dosis de vacu­nación contra influenza, porque sabemos que esto puede prevenir los casos graves”, recordó.

A su turno, Victor Martínez, viceministro de Atención Integral de la Salud, recordó: “Si va a haber una reunión familiar y yo estoy con un cuadro respiratorio, tengo que abstenerme de partici­par. Aparte de no hacer el reposo necesario para una recuperación pronta, podría contagiarle al resto. Acá más que nada es tener considera­ción del que va a participar de esa reunión”.

Actualmente, el protocolo para casos positivos de covid-19 establece 7 días de reposo para una recuperación com­pleta. Esto siempre tomando en cuenta el esquema de vacunación del paciente.

El director de Vigilancia de la Salud, Guillermo Sequera, instó por su parte a la ciuda­danía: “Hay que tener un uso racional del tapabo­cas, tenerlo en el bolsillo o la cartera y usarlo cuando uno tiene síntomas o estará en una reunión con mucha gente o en un entorno donde haya poca ventilación. El que es consciente de que está con una enfermedad debe ser res­ponsable y evitar visitar luga­res sociales o, al menos, usar el tapabocas cuando está entre la gente”, apuntó.

VACUNACIÓN

Uno de los problemas cen­trales del país es que un 41% de la población no se puso la primera dosis y casi 2 millo­nes de personas no cuen­tan con la tercera dosis, de acuerdo a datos del Programa Ampliado de Inmunizacio­nes (PAI).

Hay vacunas, lo que no apa­rece es la voluntad de la gente para ponérselas a pesar del insistente llamado de los trabajadores de la salud. Las vacunas son seguras, efecti­vas y salvan vidas, por lo que su aplicación debe incorpo­rarse como un hábito, rei­teró el PAI, que instó tam­bién a vacunarse contra la influenza, que tiene su pico estacional entre los meses de marzo y abril hasta setiembre y octubre.

Se anunció también que antes de fin de año llegarán al país 500.000 dosis de la vacuna Moderna contra las variantes Wuhan y Ómicron del covid-19. A partir del 2023, la vacu­nación será una sola vez al año, al igual que la influenza, se indicó a su vez.

Será importante un esfuerzo en los operativos para vacu­nar, ya que el 76% de la pobla­ción objetivo no recibió la ter­cera dosis (primer refuerzo) y el 95% no recibió la cuarta dosis (segundo refuerzo).

Cabe recordar que las vacu­nas se encuentran disponi­bles para la ciudadanía en los diversos puestos de vacuna­ción extendidos en todo el territorio nacional: “Hay un número demasiado impor­tante de personas que no están completando el esquema de vacunación. Completar el esquema de vacunación es tan importante como vacunarse”, dijo Martínez a Nación Media.

Esto teniendo en cuenta que el virus está circulando en Argentina, Brasil, Colombia y Perú, y se prevé un aumento de casos de covid-19 en los meses venideros en toda la región.

MENSTRUACIÓN ABUNDANTE SERÍA REACCIÓN A VACUNAS

La Agencia Española de Medi­camentos y Productos Sanita­rios (Aemps) ha publicado el 18º Informe de Farmacovigilan­cia sobre Vacunas Covid-19, en el que se actualiza informa­ción sobre distintos asuntos de seguridad. Uno de ellos es el sangrado menstrual abun­dante como posible reacción adversa de las vacunas de ARNm (Comirnaty, de BioN­Tech/Pfizer, y Spikevax, de Moderna) frente al covid.

Por ello, recomienda que se incluya en la ficha técnica y en el prospecto de estas vacunas, aunque expuso: “No existe evidencia que sugiera que las alteraciones menstruales ten­gan algún impacto en la repro­ducción o en la fertilidad de la mujer. El balance beneficio/riesgo de Comirnaty y Spike­vaxse se mantiene favorable”.

Se han notificado en todo el mundo alrededor de 9.000 casos de sangrado menstrual abundante tras la adminis­tración de cualquier dosis de estas vacunas (tanto en pri­mera dosis como en segunda y en dosis de refuerzo). En un reducido número de mujeres, este sangrado más abundante ocurrió tanto con la dosis inicial de la vacuna como tras la admi­nistración de la segunda. La información disponible indica que la gran mayoría de estos casos “son transitorios y auto­limitados, sin revestir grave­dad”, reportó el diario español El Mundo.

“Seguimos en deuda con el sistema de salud”

El infectólogo considera que es buena la provisión de vacunas que el país tiene actualmente. “Tengo entendido que el Ministerio de Salud compró cuatro millones de dosis de Moderna y que eso se va a ir distribuyendo de acuerdo a la necesidad”, comentó recordando que es importante vacunarse.

Menciona luego el daño que el discurso y la actitud “antivacunas” provocaron en el mundo. “Esto hizo que la política sanitaria a nivel mundial de vacunar al 70 u 80% de la población, como era el objetivo inicial, no se pudo lograr”, apuntó.

“Con relación a nuestro sistema de salud siempre estamos en deuda. Hay que hacer inversión en infraestructura, en tecnología, en inteligencia, en personal humano, tanto médico como paramédicos y administrativos”, consideró.

“En insumos tenemos que lograr que Paraguay sea un país sustentable por sí mismo en el suministro. Hay que fomentar la industria nacional para que no nos vuelva a pasar lo que nos pasó, cuando en un momento en que todos los países del mundo pensaban primero en ellos mismos y luego en los demás, nos hemos quedado sin insumos, medicamentos muy necesa­rios para tratar pacientes con casos graves de covid y otras enfermedades que requerían sedantes, relajantes y analgésicos”.

Comentó que la situación mundial con rebrotes en el Norte llama a estar atentos porque “también la gente le ha perdido un poco el respeto al covid desde el momento en que se ha conver­tido en una pandemia contro­lable como es por el momento y esperemos que siempre siga así hasta que desaparezca”.

Balmelli instó a tomar los recaudos como usar tapa­bocas en lugares cerrados y completar el esquema de vacunación a fin de evitar que el sistema sanitario sea sobrepasado por la cantidad de enfermos de covid, puesto que cuando eso ocurre el ser­vicio de salud deja de atender otras enfermedades y pueden ocurrir también otras muertes debido a esta desatención. “Estas son muertes paralelas o secundarias y no cuantifica­das dentro del covid y que siguen existiendo; por lo tanto, a tener conciencia social y conciencia individual de que de esta salimos todos juntos”, concluyó.

“Hay vacunas de sobra”

Para el director de Vigilan­cia de la Salud, Guillermo Sequera, el hecho de que un 41% de la población no tenga puesta la primera dosis de la vacuna anticovid se debe en buena medida a que se comenzó a vacunar tarde.

Si bien las primeras dosis se aplicaron en febrero del 2021, la vacunación masiva comenzó en junio, “cuando todo el mundo, inclusive los países de la región, venían vacunando ya desde marzo, abril y esos dos o tres meses fueron cruciales porque a partir de ahí se genera entre comillas la mala fama de las vacunas. A partir de ahí los antivacunas empezaron a hacer toda su campaña y el ánimo de la gente también fue cambiando. Entonces, cuando llega la vacuna­ción masiva, la gente que estaba convencida de vacunarse en enero o en febrero, ya en junio de 2020 no se la ponían y ahí perdimos un momento”, admitió.

Consideró también que cruzando datos de vacunación con la Encuesta Per­manente de Hogares (EPH) “se ve que las peores coberturas están en los lugares de mayor pobreza y de peor nivel educativo”.

Consultado sobre la provisión de biológicos, informó que hay vacunas. “Hay de sobra y de hecho nos quieren seguir donando, pero ya no recibi­mos más”, contó.

Dijo que en lo que hace a infraestructura, “siempre va a faltar, pero de lo que teníamos en el 2020 a lo que tenemos hoy se triplicó la respuesta para este tipo de situaciones”. Expuso que la mayoría de los casos que se reportan son de la variante Ómicron, que tiene muchísimas subvariantes. El espe­cialista indicó que el rebrote que se vive tiene que ver con el invierno en el hemisferio norte del planeta y con gente que se mueve por trabajo o turismo.

“Eso trae los virus y trae también influenza y un montón de cosas que están circulando en el norte ahora. Creo que vamos a tener esta ola, que en líneas generales no va a ser tan grave como las últimas. Sí hay mucho contagio por­que las restricciones no son las mismas. Pero tal vez la cantidad de ingresa­dos a los hospitales y la cantidad de fallecidos sean, en términos relativos, menores a los de la última ola”.

Dijo que había que estar atentos a una posible combinación de casos de covid con dengue y chikunguña: “Nosotros tenemos ya un momento de dengue y muchos casos de chikunguña, inclusive un poco más que dengue. Y creo que la ola va a tomar fuerza allá por febrero, marzo. Hay siempre una com­petencia entre los virus. Creo que hay muchas cosas que aprender todavía, porque el que habla con certezas en la pandemia es que no aprendió nada en estos últimos 3 años”, señaló.

Dejanos tu comentario