MARTÍN VILLAGRA, periodista, martin.villagra@nacionmedia.com

Cerro Porteño dio pena y pasó otra vergüenza en el final ante General Caballero, que asestó el golpe de gracia en La Nueva Olla, dando vuelta un marcador adverso en tiempo agregado.

El Ciclón llegó sin margen de error, con solo el triunfo como opción ante General Caballero para seguir en la pelea del título del torneo Apertura. El Azulgrana se sacó pronto la presión y antes del cuarto de hora se puso en ventaja a través de un penal materializado por Claudio Aquino. Un balón pegó en la mano de Juan Saborido, que el VAR avisó al juez principal para la sanción.

Si bien General Caballero se plantó con fuerza, Cerro Porteño desperdició grandes chances con Braian Samudio, Antonio Galeano y Daniel Rivas. Claudio Aquino y Alexis Fariña fueron encargados de la generación, pero la diferencia fue corta al fin del primer periodo y nunca garantizó nada.

En el segundo tiempo, Cerro siguió peleado con el gol, dilapidando acciones claras con Aquino, Galeano, Samudio y Carrizo. El golero Gustavo Arévalos se portó con grandes tapadas para un General Caballero, que silenció Barrio Obrero con el gol de Hernán Pérez, quien antes había avisado lo que venía. Cristhian Báez había ganado y dio el pase exacto.

Cerro acusó el golpe, dejó espacios y se expuso al contragolpe en procura de la victoria. La entrada de Diego Churín era para jugarse por todo.

En el tercer minuto de tiempo agregado, llegó la jugada del segundo gol, que decretó el resultado y aseguró el título para Libertad, que hizo su parte ante Olimpia. Teodro Arce, quien había ingresado, cerró el contragolpe y anotó el tanto de la victoria para un meritorio General Caballero, que supo aguantar las adversidades. Hay que decirlo, el cerrista Federico “Pachi” Carrizo regaló la pelota que propició el desenlace. Es fracaso para Cerro.