MARTÍN VILLAGRA, periodista, martin.villagra@nacionmedia.com
Alberto Espínola, de cabeza, adelantó al Ciclón y lo igualó Fernando Fernández en el primer tiempo. Sobre tiempo cumplido, Claudio Aquino marcó de penal el tanto de la victoria azulgrana
Las formas muchas veces quedan de lado, como en este caso. Cerro Porteño cumplió su parte y logró un sacrificado pero justo triunfo sobre Guaraní en Ciudad del Este.
El Ciclón sigue con chances, aunque no depende de sí mismo para acceder al título de campeón cuando todavía le quedan cuatro fechas al desarrollo del torneo Clausura.
El Ciclón tomó protagonismo y se sacó pronto la presión con el gol de cabeza de Alberto Espínola tras gran córner de Enzo Giménez.
Sin embargo, el Aurinegro acusó recibo, igualó el trámite hasta tomar el control de las acciones y encontró la paridad luego de una mala salida de Juan Patiño desde el fondo. Mérito del volante Ángel Benítez, quien robó el balón y se encargó del resto el goleador Fernando Fernández, quien con remate colocado puso el tanto de la igualdad.
Cerro sintió el golpe anímico y se vino abajo, incluso en el segundo tiempo cayó en innumerables errores en medio de apuros con el tiempo transcurriendo velozmente, pese a ser el equipo más ambicioso.
En el ida y vuelta, Néstor Camacho y Fernando Fernández generaron un par de picantes aproximaciones, que por poco inclinaron el desenlace a favor de Guaraní.
Cerro quemó todo con los cambios ofensivos de Claudio Aquino, Fernando Romero, Alan Rodríguez y Antonio Galeano, hasta que se generó la acción más polémica. Centro, empujón evidente e infantil del defensor Alexis Cantero sobre Robert Piris da Motta en el área, que alertó el VAR y se confirmó con la sanción de la pena máxima del árbitro principal. Claudio Aquino, en medio del suspenso, descolocó al golero Devis Vásquez y puso en ganador a Cerro Porteño, que así cumplió con sus obligaciones más urgentes.