El único duelo saba­tino de la quinta fecha quedó reservado para el superclásico de todos los tiempos. Olimpia (3 puntos) y Cerro Porteño (6) se enfren­tan en El Bosque de Para Uno, conocido también como el estadio Manuel Ferreira del conjunto franjeado. Se trata de un partido con todos los condimentos, siempre espe­cial, donde siempre se juega por mucho y con obligaciones.

Olimpia llega con mayores necesidades. El Decano ha recibido sendos golpes en una semana. Cayó ante Gua­raní (1-3) y unos días después cedió ante el brasileño Fla­mengo (4-1), en su partido de ida de local por los cuartos de final de la Copa Libertadores.

Las lesiones también cons­piran, por lo que hay varias bajas, entre ellas la del late­ral argentino Víctor Salazar, cuyo sitio es cubierto por el colombiano Sergio Otálvaro. También sigue inactivo el uruguayo Alejandro Silva, quien sufrió rotura fibrilar. Hay otros golpeados como Isidro Pitta. Cargan con inactividad Jorge Recalde y Antolín Alcaraz, ambos en proceso de recuperación.

Cerro Porteño también llega con bajas, aunque con mejor moral tras haber ganado 2-0 en su última presentación a Guaireña en La Nueva Olla. Mathías Villasanti fue trans­ferido al Gremio de Brasil, por lo que ya no forma parte del plantel. En tanto, por suspen­sión no se alista el defensor central Juan Patiño, quien fue expulsado. Alan Rodrí­guez y Pablo Adorno apare­cen como candidatos a cubrir las vacancias.

Se trata de otro clásico en medio de la pandemia, que no tendrá el calor del público en las gradas. El deseo de siem­pre es que gane el mejor, el arbitraje no tenga incidencia y se comporte a la altura de las circunstancias.

Giancarlo Juliadoza se enteró el jue­ves que fue designado para estar en el superclásico de este sábado. “En esta carrera hay que ir tranquilo, paso a paso, es un gran desafío y estoy muy contento”, dijo el árbitro a “Ver­sus radio”, por Universo 970 AM. Todavía no piensa, ni le quita el sueño la insignia FIFA. En la intermedia estuvo en el 2014, comenzó a escalar y ahora pitará su primer Olimpia-Ce­rro. Fue objetado por Olim­pia, al igual que Mario Díaz de Vivar, quien lo asistirá en el VAR. Juliadoza dio importancia al VAR, pues considera que es un asistente más. Califica, que a la hora del análisis, se hace más profundo. “Trato de hablar siempre con los muchachos dentro del marco del respeto”, dijo en relación al trato con los jugadores en el campo, los rea­les protagonistas del juego.