Hoy es el tiempo límite para que Cerro Porteño ins­criba a otro arquero para la Copa Libertadores. El libro de pases local está cerrado para el torneo Aper­tura y recién para el Clausura podrá quedar habilitado el nuevo golero tras la inespe­rada lesión de rodilla, que margina por largo tiempo al uruguayo Rodrigo Muñoz.

Al producirse la baja de Muñoz, Miguel Martínez (22 años) queda como el primero en la línea de la titularidad. La necesidad de contratar a otro portero mantuvo en vilo durante las últimas 72 horas a la dirigencia azul­grana, que activó a full bajo asesoría del entrenador Francisco “Chiqui” Arce.

Hubo varios nombres sobre la mesa como opcio­nes. Una vez contactado, el paraguayo Gerardo Ortiz (32 años) hizo todo de su parte para venir del Once Caldas de Colombia, donde es figura y capitán. La citada institución nego­ció una venta (ningún prés­tamo) y pidió más dinero del que Cerro Porteño ofreció. En medio de las arduas negociaciones entre los clubes hubo una contraoferta de parte del Once Caldas. El brasileño Vladimir (31 años), suplente en el San­tos, es otro nombre que fue visto entre las opciones.

El sorteo de la fase de gru­pos de la Copa Libertadores de América, a realizarse el próximo 9 de abril en la Con­mebol, tendrá a Cerro Por­teño (Paraguay 1) y Olimpia (Paraguay 2) como cabezas de serie, al igual que los bra­sileños Palmeiras (campeón vigente), Flamengo y si cla­sifica São Paulo; River Plate y Boca Juniors (Argentina); Nacional y Peñarol si clasi­fica (Uruguay). ­

Otro argentino opta por Paraguay. Claudio Aquino (29 años) inició formal­mente los papeleos para nacionalizarse paraguayo.

El primer objetivo tiene que ver con una cuestión regla­mentaria y a fin de no ocu­par más cupo de extranjero en Cerro Porteño u otro club eventualmente para los torneos locales. Para más adelante deja abierta la posibilidad de jugar por la selección mayor paraguaya.

El ofensivo de Cerro Porteño estuvo ayer por la mañana en una escribanía, junto a su abogado, luego realizó algunas diligencias en la Dirección Nacional de Migraciones y así dio los primeros pasos. El citado tiene tres años de residencia en el país, todavía le faltan dos para poder adquirir la nacionalidad paraguaya, consi­derando que no tiene arraigo en el país.