Tener un gato de mascota conlleva la decisión de castrarlo o no, además de entender las implicancias y consecuencias sobre esa acción. La doctora veterinaria Natali Pereira explicó en qué consiste esta intervención quirúrgica y cuándo hacerla para evitar preñeces no deseadas, prevenir enfermedades y promover una mejor calidad de vida para el animal.

La castración es una intervención quirúrgica que consiste en la extirpación de los órganos reproductivos, en el caso de los gatos los testículos y en las gatas, los ovarios, oviducto y útero. Si bien estos felinos pueden ser castrados a cualquier edad, la profesional veterinaria recomendó a partir de los 4 a 5 meses de edad, cuando el macho entra en la adolescencia y la hembra antes del primer celo.

“Influye directamente sobre las hormonas sexuales del animal, ya que se elimina la principal fuente de testosteronas en machos y el estrógeno y la progesterona en las hembras , siendo así incapaces de reproducirse. Es la técnica más eficaz para evitar preñeces no deseadas, repercute en comportamientos asociados con el patrón reproductivo”, comentó en conversación con La Nación/Nación Media.

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Beneficios de la castración

La doctora veterinaria Natali Pereira dijo que la castración tiene muchas ventajas y opinó que es el mayor acto de amor con esperanzas de una vida más larga y saludable para el animalito. En los machos, evita la formación de enfermedades prostáticas y testiculares, se reduce el marcaje del territorio hasta el 90 %, controla su instinto de escapar de casa en busca de alguna gata en celo y disminuye la agresividad hacia otros gatos machos, y así evita peleas.

“En cuanto al comportamiento agresivo de un gato no castrado, conlleva una mayor exposición de contraer enfermedades infecciosas como la inmunodeficiencia felina (VIF) y leucemia felina (ViLeF), ya que ambas enfermedades se transmiten por mordeduras de otros gatos infectados”, agregó.

En cuanto a las hembras, señaló que impide la formación de enfermedades reproductivas e infecciosas, disminuye el riesgo de la formación de tumores mamarios, previene la formación de infecciones uterinas, cuya única solución es la castración de urgencia, y evita las preñeces indeseadas, sobrepoblación y abandonos.

Natali Pereira, doctora veterinaria, dijo que la castración tiene muchas ventajas y opinó que es el mayor acto de amor con esperanzas de una vida más larga y saludable para el animalito. Foto: Gentileza

Mitos a erradicar

Las hembras deben tener una camada o pasar el primer celo antes de ser castradas, luego padecen de obesidad o sedentarismo ya que los gatos se vuelven menos activos, la cirugía de la castración conlleva muchos riesgos, el costo es muy elevado y resuelve problemas de hábitos, son algunos de los mitos más comunes y que la doctora veterinaria instó a erradicar.

“Las hembras castradas antes de su primer celo son más saludables, reducen considerablemente los porcentajes de padecer tumores mamarios. En cuanto a ambos sexos se evita que adquieran comportamientos indeseables. Lo recomendable es que consuman balanceados para castrados, evitando así la obesidad y/o problemas urinarios”, sugirió.

En cuanto a las actividades, mencionó que una buena opción es la recreación del ambiente, ofreciendo juguetes didácticos y rascadores. “El riesgo es tener un gato o gata sin castrar. La intervención quirúrgica en si es una de las más rutinarias y sencillas que se hacen a diario, siempre teniendo en cuenta las recomendaciones dadas por el profesional veterinario”, puntualizó.

Asimismo, comentó que existen jornadas de castración a bajo costo y son seguras, a las que se pueden acceder en caso de no poder costear una. Si bien no hay un precio fijo, ya que depende de la tarifa de cada profesional y varía de acuerdo a la zona y materiales utilizados, en la zona de Gran Asunción los costos oscilan entre G. 180.000 y G. 250.000 en machos y en hembras entre G. 250.000 a G. 400.000.

“Los problemas de hábitos no son solucionados con la castración, ya que solo afecta a determinados comportamientos relacionados a sus conductas reproductivas. La castración no modifica su personalidad”, remarcó. Pereira también aconsejó castrarlos a temprana edad, seguir las recomendaciones del médico veterinario luego de la intervención quirúrgica darles balanceados para castrados, y brindar mucho amor y mimo a estos felinos.

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