La falta de hierro en el cuerpo puede provocar varios problemas, incluidos dificultades para dormir. Aunque la mayoría tiende a pasar por alto las señales de alerta, es fundamental hacer ciertos cambios en el estilo de vida para mantener su nivel bajo control y mejorar nuestro ciclo de sueño.

La deficiencia de hierro o anemia es un trastorno en el que la sangre no contiene suficientes glóbulos rojos sanos, necesarios para que los tejidos corporales reciban oxígeno. Como sugiere su nombre, es provocada por la falta de hierro, un mineral esencial para que el cuerpo produzca suficiente cantidad de un componente en los glóbulos rojos que les permita transportar oxígeno, en términos médicos se denomina hemoglobina.

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Esta condición de salud puede hacerte sentir letárgico y sin aliento. Como el cuerpo se vuelve incapaz de producir hormonas del sueño sin hierro, nuestro descanso podría ser interrumpido y provocar problemas como el trastorno del movimiento periódico de las extremidades y el insomnio. Las personas con falta de hierro tienden a tener dolor en las piernas durante la tarde y la noche que ocurre durante el sueño y causa problemas para dormir.

Además, genera insomnio y despertares temprano en la mañana, es decir, que el paciente no puede volver a dormir después de despertarse. Afortunadamente, todo esto puede mantenerse a raya haciendo algunos cambios en el estilo de vida, que pueden ser efectivos para tratar la deficiencia y mejorar la higiene del sueño.

¿Cómo lidiar con la deficiencia de hierro?

Los expertos de la salud recomiendan corregir la hora de dormir y despertarse, ideal de 7 a 8 horas de descanso, y hacerlo en el mismo horario todos los días. Al momento de descansar, alejarse la exposición a la luz azul de teléfonos móviles, televisores y computadoras portátiles al menos 2 o 3 horas antes de dormir.

También sugieren comer alimentos ricos en hierro como carne, huevos y verduras de hoja verde, e incluir frutas cítricas con vitamina D como brócoli, tomates y melones. Evitar las cenas pesadas, las bebidas que contengan cafeína, el alcohol y nicotina, especialmente después de las 18:00. En lo posible, hacer actividades físicas regularmente para mantenerse en forma.

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