Mirtha Noceda es una mujer, madre y esposa que decidió desarrollar el curso de construcción en el Servicio Nacional de Promoción Profesional (SNPP). Tras terminar la capacitación, tomó todos los conocimientos adquiridos, además de coraje, y construyó su propia muralla, que ya está en etapa final. Ahora va por cambiarle la fachada a su vivienda, un quincho y una piscina.

La construcción o albañilería es uno de los oficios que históricamente fueron ocupados por hombres, pero actualmente se puede ver a mujeres con pantalones flojos, camisas holgadas y quepis para protegerse del sol mientras trabajan como cualquier otro hombre en una obra de construcción.

Esto suele ser motivo de burlas hacia ellas, pero Noceda a consecuencia de una necesidad conoció su verdadera vocación y hace oídos sordos a los comentarios negativos y construye entre ladrillos y cemento un futuro muy próspero en el oficio de la construcción.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Lea más: Cumple 190 años el animal terrestre vivo más viejo del planeta

“Yo venía buscando hace tiempo presupuesto para hacer la muralla, me pasaban y eran muy altos, solo en mano de obra me pasaban entre G. 25.000.000 a 35.000.000 y más los materiales, tenía que preparar unos G. 50.000.000 a 60.000.000, solo para la muralla y entre buscar y buscar, decidí estudiar. Empecé el curso de armador de hierro de hormigón, ya egresé de ese curso y tengo mi certificado del SNPP, y ahora estoy continuando con el curso oficial de albañil”, indicó Noceda, orgullosa de su logro en comunicación con C9N.

Recordó que toda su familia se negó en apoyarla para realizar el curso, afirmando que iba a ser una pérdida de tiempo y que ese oficio era de hombres, que era demasiado pesado para ella y que probablemente no iba a lograr nada. Igual, cumplió su deseo y fue a desarrollar el curso, aunque reconoció que le fue difícil, casi abandonó el curso, pero uno de sus maestros le pidió que si es una apasionada por el oficio que se aferre a él, pese a los obstáculos y así lo hizo.

Lea también: Docente mbyá-guaraní jubilado obtuvo su segundo título universitario a los 59 años

“El maestro, una persona que ama su profesión, me dijo quédate, vas a aprender la profesión. Cuanto más aprendía más me iba gustando y así fue que pude terminar ya una parte. Estoy a pasos de terminar la muralla, luego de terminar eso, ya estoy con el proyecto de construir mi piscina, una habitación para mi hijo, un quincho y cambiar totalmente la fachada de mi casa. Todo eso, solo con el presupuesto que me pasaron para mano de obra”, resaltó.


Déjanos tus comentarios en Voiz