"Dar un abrazo es más satisfactorio que realizar disparos al aire". En un sólo instante de enardecimiento, una acción irresponsable puede transformar un acto de amor en una tragedia.

Este 25 de diciembre se cumplen 4 años de la partida de Paz Valentina, la pequeña infante que falleció tras recibir una bala pérdida en nochebuena. Su partida dolerá por siempre y el . Liz Vera, mamá de Paz Valentina, recordó momentos a la 970 AM del infortunio que arrebató la vida de su única hija.

Explicó que -quizás la condena que pesa sobre el autor del hecho no es suficiente- pero marcó un precedente y sirvió para crear conciencia a fin de evitar cuantiosas perdidas humanas. Refirió que las festividades de navidad y año nuevo son fechas para compartir en familia, y no para realizar actos criminales.

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El 25 de diciembre de 2012, Paz Valentina se encontraba en el patio de su casa cuando a las 12 en punto -entre los estallidos festivos- una bala cae sobre su cuerpo y acaba con su vida. "Me acababa de abrazar y desear feliz navidad, bajó al piso y le llego la bala, de un momento de amor pasar a tragedia es algo que nadie desea", rememoró Liz.

En cuanto a las campañas de concientización que realiza, indicó que su lucha es para que nunca mas ninguna familia pase por esta clase de perdida irreparable. "Creo que la bala puede caer cualquier lado, inclusive en la casa de familia del que dispara", dijo. Agregó que un abrazo da más satisfacción que un disparo al aire.

Señaló que cuando uno pierde a un ser querido, la vida de la persona cambia para siempre. Reveló que hasta hoy día ya no pudo tener otro hijo. "El vacío es muy grande, trato de sobrellevar por el amor que siento por ella. Se va cumplir 4 años de aquel día pero me parece que fue ayer", dijo.

Llamó al sentido común de la gente sobre el acto criminal que uno puede llegar a cometer. Aconsejó a las personas a mirar a su alrededor y a su familia, para que vea el tesoro maravilloso que tiene, ya que en un segundo, por una acción indebida se puede perder todo.

Condena

Recién en abril de este año, la justicia condenó al taxista Jorge Prisco Ledesma Ortiz a cinco años de pena privativa de libertad, al hallarlo culpable del disparo que realizó con un revólver calibre 38, en la madrugada del 25 de diciembre del 2012 y que acabó con la vida de la niña Paz Valentina.

El taxista realizó tres disparos al llegar la medianoche y uno de ellos terminó en el cuerpo de la niña que estaba jugando con su perro en el patio de su casa, en el barrio Santa María de Asunción.

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