María José Ramírez Riquelme y Cristhian Flo­rentín Pérez Ruiz unieron sus vidas en matrimo­nio en la iglesia Sagrados Corazones de Jesús y María. Luego de la emotiva ceremonia nupcial los recién casados dieron una fiesta de esplén­didos matices en el salón del Comité Olímpico Paraguayo.

Para tan especial noche de su vida, María José encomendó al diseñador Negro Váz­quez del sello Cabure la creación de su vestido de novia, un solero entallado de organza total­mente trabajado con encajes, guipure y pasama­nería con aplicaciones de cristales. Por su parte, Jadiyi Yudis Yaluff le hizo el tocado, una vincha de perlas, flores de nácar y pedrería del que iba sujeto el velo de tul, ricamente trabajado con encajes y perlas.

Completando su look nupcial, en sus manos llevó un ramo de rosas blancas y rosa bebé con follajes, las mismas flores que se destacaron en la decoración realizada en el salón de la fiesta por José Benítez Ambientaciones. El servicio gastronómico del banquete llevó el sello de la chef Catalina Villalba que ofreció un buffet de platillos fríos y calientes. El violinista Steven Wu matizó la velada a la hora de la cena; la fiesta continuó con los enganches del DJ Mar­tín Noe. El evento fue coordinado por Martha Pérez y Celia Benítez para MyC Eventos.

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La novia, vestida por el diseñador Negro Vázquez.
María José Ramírez Riquelme y Cristhian Florentín Pérez Ruiz, en un momento de su fiesta de boda.

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