Cada vez son más quienes optan por estos productos que, en su mayoría, son artesanales. Además de ecológicos, están elaborados a base de ingredientes naturales y aceites vegetales que pueden usarse tanto en el cabello como en la piel.
Las ventajas que presentan estos productos de higiene personal son: que rinden más, son más económicos y fáciles de llevar, también que al ser productos waterless -preparados casi sin agua- no requieren de conservantes como los parabenos, emulsionantes, siliconas ni sulfatos, que muchos productos de cosmética convencional sí tienen y que pueden irritar o dañar la dermis.
Los shampoos y enjuagues sólidos son de gran durabilidad. Una barra de 100 gramos equivale a 3 botellas de shampoo o enjuague común gracias a su alta concentración, lo cual implica un ahorro económico a largo plazo. Por otro lado, al ocupar menos espacio se reduce la huella de carbono a la hora de ser transportada.
Generalmente este dato pocas personas lo tienen en cuenta, pero cuando usamos jabones, shampoos y enjuague “normal”, el agua se contamina por los químicos que desprenden. En cambio, cuando se usan estos productos ecológicos, los desechos son biodegradables y no generan impacto negativo en el medioambiente.
Para continuar enumerando sus bondades, estas barras solidas de higiene personal vienen envasadas en papel, cartón o en envoltorios libres de plástico. Tampoco poseen aceite de palma -un ingrediente presente en la mayoría de los shampoo tradicionales- y gracias a su eliminación se contribuye a proteger miles de hectáreas de selvas tropicales que son deforestadas para la plantación de esta planta.
Por último, al estar en auge existe una gran variedad de jabones que se adaptan a todo tipo de cabellos, y como son elaborados con aceites y nutrientes naturales, los resultados se ven reflejados en melenas sanas y espléndidas. Es cuestión de que busques cual se adapte a tu tipo de pelo y te animes a probarlo.
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