Se le atribuyen muchas bondades y la mayoría con relación al cuidado de la piel. Y es que sus propiedades influyen en la producción de colágeno y brinda mayor elasticidad en la dermis. La manera de elaborarla es muy sencilla, por eso te contamos para qué sirve y como prepararla.
Hay una creencia que dice que el agua de rosas encierra en su esencia única los secretos de la belleza y la salud. Muy en la antigüedad, por el siglo X, ya la utilizaban los árabes y fueron ellos quienes la introdujeron a Occidente.
Su uso más frecuente es como tónico facial, está indicado para pieles sensibles y se aconseja aplicarlo luego de la limpieza y antes de hidratar el cutis con la crema. Durante las épocas de frío, es normal que se nos reseque el rostro y la sintamos tirante, ahí es donde el agua de rosas combate esto y lo mejor es que se puede usar varias veces al día sin importar que tengamos maquillaje puesto.
Combate las ojeras. Se puede aplicar algodones bajo los ojos remojados en agua de rosas durante unos minutos, sus propiedades desinflamantes ayudaran a mejorar el aspecto general de nuestra mirada. Otra de sus bondades es su poder antibacterial y cicatrizante, combate y elimina el acné, las irritaciones y la las rojeces.
El agua de rosas se usa además para aliviar los pies cansados, se los puede sumergir en un balde de agua tibia mezclada con este producto. Mejora los dolores de cabeza si se usan compresas con este liquido y se aplican sobre la frente. Rociarlo sobre la almohada antes de ir a dormir brindará un efecto relajante y se obtendrá un mejor descanso.
Varios estudios científicos afirman que los pétalos de rosas son buenos para la salud digestiva y el estreñimiento, se puede consumir incluido en ensaladas o preparando té. Su alto contenido en vitamina C, B y E serían necesarios para sintetizar el colágeno, según señala un artículo de Nutrients.
¿Cómo podemos preparar agua de rosas en casa?
Vas a necesitar medio kilo de pétalos de rosas, medio litro de agua destilada, una cacerola con tapa y una botella de cristal con cierre hermético. El procedimiento es simple, hay que poner a calentar los pétalos en el agua destilada, una vez que rompe en hervor bajar el fuego. Es muy importante que no se escape el vapor ya que este es el que contiene el aceite esencial de las rosas.
Una vez que hayas bajado la temperatura del fuego debes dejar hirviendo 10 minutos más, apagar y dejar reposar. Una vez que haya bajado todo el vapor, vamos a colar el agua y pasarlo a nuestro recipiente. Al día siguiente ya estará lista para usarse.