A muchas nos gusta llevar el cabello largo y nos sentimos orgullosas cuando vemos que está sano de la raíz a las puntas. Algunas cuentan con la “suerte” de que su melena no necesita de mayores cuidados que un lavado normal con los productos indicados para su tipo pelo, mientras que otras debemos realizar una serie de cuidados más meticulosos para que esté saludable.
Cualquiera sea el caso, en algún momento nos toca lidiar con las puntas secas, maltratadas y abiertas, esto puede suceder por diferentes factores; por eso lo primero que los especialistas recomiendan es cortar un par de centímetros, pero ¿qué otras soluciones hay?
Es indispensable tener conocimiento de todos los hábitos que podemos estar realizando y que, sin darnos cuenta, dañan a las puntas del cabello. Entre ellos el uso excesivo de secador, planchitas o bucleras. Además de estos, hay otras cosas que debemos prevenir.
No saltees el uso de acondicionador. Elegí uno de buena calidad, si es para cabello seco o dañado mejor. “En el caso de no utilizar acondicionador en tu rutina de cuidado la punta se podrá debilitar a la hora de desenredar, se reducirá el brillo del cabello y tendrás sequedad y un pelo más encrespado”, explica María Baras, experta de Pantene.
Durante el lavado tampoco te excedas en la cantidad de shampoo. La cantidad no determina un mejor resultado, su función principal el limpiar el cuero cabelludo y cuando abusamos de él eliminamos la barrera natural que el cuerpo produce para proteger el cabello y favorece que las puntas se dañen.
No enrolles tu cabello con la toalla. Esta es una de las costumbres más comunes que tenemos después de bañarnos. Apretamos el cabello con la toalla para sacar el excedente de agua e incluso para secarlo, esto puede provocar quiebres de las fibras capilares y causar porras. Lo mejor es usar una toalla específica para el cabello y sacar el exceso de líquidos con cuidado, también recomiendan dejar que el cabello se seque solo.
Cuando peines tu melena, no lo hagas desde la raíz. Este es otro hábito frecuente. La manera correcta de peinarnos es desde las puntas hacia arriba, si lo hacemos en la dirección contraria predisponemos a que se enrede, y más aun después del lavado, hacer esto también daña las puntas.
Existen aceites que podes aplicar en las puntas, al menos, una vez por semana para que se mantengan sanas y fuertes. Alguno de los podrías usar son: el óleo de almendras, coco, oliva, queratina, argán. Se pueden conseguir fácilmente y no tienen un gran costo.
Por último, y no menos importante: tomá suficiente agua. Mantenernos hidratadas es clave para el buen funcionamiento de nuestro organismo, y esto también influye en el aspecto general de nuestro cabello y piel.