Se volvió un gran aliado últimamente. Y es que ayuda a fortalecer el sistema inmune, regula los niveles de colesterol, ayuda a quemar grasas y brinda sensación de saciedad. Pero sí, todavía hay más.
Quienes lo consumen saben que posee propiedades antioxidantes, hidratantes y antiinflamatorias. También en el ámbito de la belleza fue ganando terreno porque se lo utiliza para el cuidado de la piel y el cabello. ¿En qué más se lo puede usar? Aquí te contamos más funciones para las que te puede servir en la rutina diaria.
Quemaduras y heridas
Es uno de los mejores remedios para tratar la piel de todo tipo de quemaduras y daños. Sus propiedades antiinflamatorias y antibacterianas previenen infecciones en la zona afectada y ayudan a calmar la irritación y enrojecimiento.
Caída de cabello
Sus propiedades promueven el crecimiento sano del cabello, además previene la caída prematura del mismo gracias a que lo fortalece desde la punta hasta la raíz.
Protector
Muchas veces ocurre cuando nos rasuramos las piernas que nos raspamos la piel o nos cortamos, si empleamos aceite de coco antes de pasarnos la maquinita vamos a prevenir esta situación. Además vas a proteger tu piel de infecciones y la mantendrás hidratada y brillante.
Acondicionador
Funciona solo en el caso de que tu cabello sea grueso y seco. Podes utilizar aceite de coco en las puntas y parte de la melena un par de veces por semana, recordá no aplicar en el cuero cabelludo si buscamos este efecto.
Dientes más blancos
Como es antibacteriano ayuda a blanquear los dientes, eliminar el sarro, desinflamar las encías y fortalecer el esmalte. Aplicalo en tus dientes tres veces por semana y dejalo actuar por unos 20 minutos, luego realiza tu cepillado habitual.
Desmaquillante
Ni el rímel ni la base más resistente son rivales del aceite de coco. Puedes aplicarlo prensado en frío o dos gotitas en un algodón y pásalo por tu rostro. No quedará ni rastro de maquillaje y además tendrás la piel radiante.