Si bien el envejecimiento es un proceso inevitable y las arrugas, el crujido de las articulaciones y el cansancio aparecen con la edad, ciertos hábitos aceleran el proceso. Te contamos todo lo que debes evitar.
El cuerpo no absorbe los nutrientes de la misma forma a medida que envejece, tampoco protege de los efectos nocivos de la contaminación. Y si bien la genética juega un papel importante en cómo se va desarrollando el envejecimiento, nuestros hábitos también tienen un impacto fundamental.
Lo que comes, cuánto ejercicio haces, la exposición al sol y varios otros factores pueden acelerar la aparición de problemas comunes relacionados con la edad, y una de ellas se refleja en el aspecto de la piel. Aquí los errores de estilo de vida que aceleran la aparición de las arrugas, manchas y resequedad.
1. No usar protector solar. Independientemente del clima o el entorno, la protección solar es una herramienta importante para luchar contra los signos del envejecimiento. Debe ser una medida de salud durante todo el año para proteger tu piel del daño. Elige un protector solar de amplio espectro con SPF-30 o superior y resistente al agua.
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2. No cuidar la piel. No tener una rutina de cuidado de la piel acorde a tu tipo de piel puede hacer que envejezcas más rápido. Además, es importante agregar productos antienvejecimiento a tu rutina a mediados de los 20 para ver resultados a largo plazo.
3. Aplicar productos que irritan tu piel. ¿Sabías que la aplicación de productos agresivos pueden provocar inflamación? Usar productos que irriten, piquen o quemen tu piel pueden generar un envejecimiento prematuro.
4. Llevar un estilo de vida sedentario. No mantener un buen estilo de vida es uno de los factores más importantes que hacen que los signos del envejecimiento aparezcan más rápido. Fumar, consumir demasiado alcohol, no hacer ejercicios y no llevar una dieta saludable nos envejece de manera prematura.
5. No visitar a un dermatólogo. La salud de la piel es tan importante como la de otros órganos, por eso se recomienda visitar a un dermatólogo para un mejor cuidado de la dermis.
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