La semilla de chía es considerada un alimento rico en fibra y ácidos grasos esenciales que permite mantener saludable al organismo.

Su consumo se ha vuelto frecuente desde que se han dado a conocer sus miles de beneficios, entre los cuales se destacan:

Contiene omega3 y omega6

Las semillas de chía son muy ricas en estos dos ácidos grasos esenciales, a los cuales el organismo accede solo por medio de los alimentos (nueces, pescado, etc.), ya que no puede fabricarlos por sí mismo. Estos son muy beneficiosos para la salud: ayudan a proteger el corazón, reducen los niveles de colesterol y la presión arterial, mantienen en óptimo estado al sistema nervioso e inmune, etc.

Alto contenido en fibra

Es su característica más resaltante. Ayuda a mantener el colesterol y la glucosa en la sangre a niveles adecuados. Además, facilita la función intestinal, permitiendo que el organismo absorba mejor los nutrientes. Es un excelente aliado para la pérdida de peso.

Tiene antioxidantes

Los antioxidantes permiten la protección y el mejor funcionamiento de las células. La función principal de estas sustancias consiste en eliminar compuestos tóxicos para el organismo (radicales libres) que puedan generar enfermedades degenerativas, cáncer, enfermedades cardíacas, envejecimiento, etc.

Es rica en vitaminas y minerales

Por eso, la chía es considerada un alimento muy nutritivo, porque contiene vitaminas C, E, A, B1, B1 Y B9 que aportan distintos beneficios al organismo. Asimismo, se compone de minerales importantes como el fósforo, el calcio, el magnesio, y también de nutrientes como las proteínas, fundamentales para nuestro sistema óseo.

Las semillas de chía pueden combinarse con yogures, ensaladas, postres o platillos salados saludables, todo es válido, ya que no pierden sus propiedades nutricionales. Lo que sí es importante saber es que los especialistas recomiendan consumir entre tres a máximo siete cucharadas soperas por día.