El rubro del cuero se encuentra en expansión hace un tiempo y la demanda sigue creciendo ya que la gente va conociendo las bondades de esta materia prima nacional. El emprendimiento Root se hace lugar en este sector, y nace de la conjunción de ideas de 4 amigos que buscan ofrecer productos de mayor calidad a menor precio, y al mismo tiempo generar mano de obra paraguaya.
Maria Paz Vaesken R.D / @mariapazvaesken
paz.vaesken@gruponacion.com.py
Andre Fardel, director de Root, indicó que, como muchas otras marcas, el emprendimiento surgió durante la pandemia. “Nos juntamos en la pandemia entre amigos de diferentes áreas laborales y decidimos mejorar algo que ya existía y dejar nuestra marca. Los primeros desafíos fueron encontrar artesanos capacitados y materia prima de primera. Luego teníamos que ver cómo íbamos a posicionar el producto, así fue que golpeando puertas, varias empresas confiaron en nuestro producto y decidieron comprarnos”.
Actualmente trabajan con diferentes proveedores de cuero y van seleccionando según el producto que desean desarrollar, “si queremos hacer una billetera diferente o extravagante, recurrimos a uno u otro proveedor”, explicó.
Agregó además, que las personas los eligen porque ven que son productos de alta calidad. “Hemos trabajado mucho en los valores de la marca, buscamos dar un buen mensaje a los consumidores sobre el uso de artículos con cuero, un material extremadamente duradero”.
Artículos disponibles en diseño nacional
Actualmente su producto estrella es el neceser de doble cierre (G. 270.000), pero además cuentan con billeteras (G. 150.000), cintos (G. 100.000) y zapatos (G. 270.000). “Muy pronto tendremos un catálogo más amplio con llaveros, tarjeteros, entre otros”, detallan desde la marca. Todos los productos son 100% de cuero paraguayo y pueden encontrarlos en @rootcueros.
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Importadores esperan que cosecha de soja pueda repuntar para presionar a la baja del dólar
El presidente del Centro de Importadores del Paraguay (CIP), Iván Dumot, compartió la preocupación del sector ante la desmedida suba del dólar bancario que ya escaló a 7.500 guaraníes, lo cual impacta directamente en todos los productos que se adquieran del exterior, por ende, al consumidor final.
Si bien, son factores exógenos al país, el titular del gremio indicó a La Nación/Nación Media que esperan que la situación se pueda mejorar, una vez que la cosecha de soja tardía pueda repuntar con las exportaciones, que es lo que presiona a la baja de la moneda americana.
“Vemos con mucha preocupación este escenario del tipo de cambio, que ya habíamos advertido en marzo sobre el movimiento atípico, la tendencia cuando ya se dio una escalada del dólar bancario, lo cual fue llamativo porque no había motivos internacionales que justificaran”, expresó.
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Pico más elevado
Y como no se corrigió esto, la divisa norteamericana mantiene su tendencia al alza, ubicándose en la última semana el cambio interbancario con el pico más alto en lo que va del 2024. La escalada se dio por la presión internacional, debido a las medidas anunciadas por el Sistema de la Reserva Federal (Fed), de que demoraría más en bajar la tasa de interés de los bancos, explicó.
Dumot agregó que la cifra de 7.500 guaraníes alcanzada no estaba en los pronósticos, teniendo en cuenta que por lo general recién después del segundo semestre del año cuando ingresan las divisas por exportaciones de la soja es que se suelen dar las subas, como preparativos para los ingresos de importaciones para fin de año.
Recordó que la expectativa inicial de los economistas era que se arrancaría el año en 7.300 guaraníes, para en esta época descender a los 7.200, y recién para finales de año repuntar en el orden de los 7.400 guaraníes a 7.500 guaraníes. Por lo que, si se mantiene la tendencia alcista, la cotización de la divisa podría subir 10 %, asomándose a los 7.600 guaraníes o 7.700 guaraníes para diciembre, advirtió.
Proporcional a precios finales
Dicha nueva previsión, podría traer un fuerte impacto a la actividad local, teniendo en cuenta que la incidencia del tipo de cambio es directamente proporcional a las importaciones de productos. Es decir, si el valor de la divisa cierra con un 10 % más, los productos se incrementarán en la misma medida, advirtió el titular del CIP
Lo cual puede variar hacia una mayor alza en el caso de los combustibles, debido a que depende de la cotización internacional del petróleo, por lo que el aumento al precio final puede ser más, incluso, impactando al consumidor final. Es así que el sector importador espera una mejora, que para este mes de mayo se pueda mover con más velocidad las exportaciones oleaginosas, y de esa manera presionar a la baja del tipo de cambio, siendo ideal para junio al menos un número más razonable, acotó.
Datos claves
- El tipo de cambio llegó a su pico más elevado en lo que va del 2024, ubicándose en 7.500 guaraníes.
- El alza desmedida preocupa al sector importador, pues la tendencia es que recién al segundo semestre se den estos saltos.
- Desde el CIP esperan que la cosecha tardía de la soja pueda repuntar, que es lo que motiva a presionar a la baja el dólar.
Fuente: Iván Dumot, presidente del Centro de Importadores del Paraguay (CIP).
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Don Cocido, el emprendimiento que se transformó en un legado de amor
Don Cocido, el original puesto de desayunos en modalidad de food truck actualmente se encuentra frente a la fundación San Rafael del padre Aldo Trento. El emprendimiento tiene una trayectoria de más de cinco años y su historia no es solo de superación, sino también de amor y entrega.
El matrimonio conformado por Lourdes Ojeda y Luis Cortesi decidió emprender en la venta de desayunos luego de que Lourdes fuera diagnosticada de cáncer y empezara su tratamiento. Ella decidió emprender en algo propio y trabajar desde su casa, para así solventar sus medicamentos y estudios.
“La idea fue de mi esposa Lourdes, ella era una visionaria, siempre veía las oportunidades en medio de las crisis. Fue así que en una de las idas para su tratamiento vio un carrito eléctrico que vendía cocido y dijo ‘como quiero para colocar frente a casa y poder vender cocido y chipa’. Yo, como quería cumplir su deseo, vi la manera de comprarle el carrito y como una sorpresa se lo regale. Al poco tiempo de habilitar el puesto ya teníamos personas que llegaban para desayunar”, indicó Luis Cortesi en conversación con La Nación/Nación Media
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Con el tiempo la clientela se iba formalizando y el matrimonio decidió expandir el negocio, pero no tenía muy claro cómo conseguir un local sin tener que invertir mucho dinero. Fue así que tras buscar opciones y pensar en posibles ideas como la de un contenedor, Luis logró dar con un colectivo que estaba en desuso en una parada cerca de su casa y se le ocurrió la idea de convertirlo en un pequeño restaurante.
“Era un colectivo que ya no estaba en funcionamiento; entonces, me acerqué al dueño de la línea y le ofrecí que me lo vendiera. Ya con la ayuda de mi esposa y con algunas ideas inicié la restauración. Empecé a ponerle el sistema eléctrico, a montar la cocina y reutilizamos los asientos. Así fue quedando cada vez más acogedor nuestro nuevo Don Cocido”, relató.
Con el paso de los días y la puesta en funcionamiento del nuevo local, la pareja sentía que necesitaba un toque de color, que los diferenciara y sobre todo que trasladara el amor hacia lo nacional, por lo que le pidieron ayuda al artista Tomás Salinas, quien fue el encargado de plasmar un paisaje campestre paraguayo, muy pintoresco y llamativo.
Los retos
Como a todos los comercios y empresas, la pandemia fue un desafío para Don Cocido, que continuó brindando sus servicios implementando todas las medidas sanitarias. Al levantarse las restricciones, la pareja propietaria atravesó una prueba mayor, el deterioro de la salud de Lourdes.
Si bien el cáncer había estado en recesión durante varios meses y le permitió a Lourdes culminar una segunda carrera universitaria, además de llevar adelante el negocio de Don Cocido, que había crecido y consolidado su cartera de clientes, lamentablemente la enfermedad avanzó y el año pasado Lourdes pasó a la vida eterna.
El legado de amor
“Lourdes era una persona que siempre veía el lado bueno de las cosas y trataba de mantenerse positiva, ya en los últimos días de vida acudimos al padre Aldo Trento, para que nos ayude, porque sentía mucho dolor y en la fundación está el único centro paliativo del dolor. Mi esposa apenas entró empezó a sentir menos dolor y los siguientes días, hasta su partida, se la veía mucho más aliviada”, recuerda Luis.
Cortesi remarcó que durante su estadía en el hospital de la fundación en varias ocasiones su esposa le insistía que quería desayunar cocido con mbeyu y que extrañaba trabajar en el negocio que ambos habían creado, y le sugirió a su esposo traer el carrito más pequeño para vender sus desayunos y permanecer juntos.
“Ella siempre me pedía videos y fotos de cómo estábamos en el local trabajando mientras ella estaba internada. Un día se le ocurrió traer el carrito aquí, a la esquina de la fundación y como siempre le cumplí el deseo. Todos los funcionarios de la zona venían, además de las enfermeras e inclusive el propio padre Trento, quien es fanático del mbeyu con cocido”, comentó.
Luego del fallecimiento de Lourdes y por un deseo suyo, Luis trasladó Don Cocido enfrente a la fundación, donde continúan sirviendo desayunos y donando las ganancias a la fundación como retribución al amor y al servicio que recibió su esposa.
“Ella me pidió que donemos lo recaudado a la fundación, y cumplimos ese pedido todos los meses, desde su partida. Luego de pagar el mantenimiento y los gastos varios del local doy todo lo recaudado, a nosotros este lugar nos ayudó mucho y el deseo de mi querida esposa fue ayudar a los que podemos”, finalizó don Cortesi.
El emprendimiento Don Cocido ha trascendido y pasó de ser un negocio fundado en el amor, a una manera de colaborar con quienes padecen enfermedades terminales y reciben atención de calidad en el centro médico de la fundación San Rafael.
Datos clave
- Don Cocido es un puesto de desayunos en la modalidad food truck. Actualmente, está ubicado frente a la fundación San Rafael del padre Aldo Trento.
- Lleva funcionando más de cinco años y su menú se centra en el desayuno con alimentos tradicionales, como la chipa, el mbeyu y el cocido.
- Tras el fallecimiento de su creadora, Lourdes, las ganancias del local son donadas a la fundación.
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Don Cocido, emprendimiento que se transformó en legado de amor
La idea del negocio fue de Lourdes Ojeda, una exfuncionaria de La Nación, quien decidió trabajar desde su casa después de ser diagnosticada de cáncer.
Don Cocido, el original puesto de desayunos en modalidad de food truck actualmente se encuentra frente a la fundación San Rafael del padre Aldo Trento. El emprendimiento tiene una trayectoria de más de cinco años y su historia no es solo de superación, sino también de amor y entrega.
El matrimonio conformado por Lourdes Ojeda (exfuncionaria del diario La Nación) y Luis Cortesi decidió emprender en la venta de desayunos luego de que Lourdes fuera diagnosticada de cáncer y empezara su tratamiento. Ella decidió emprender en algo propio y trabajar desde su casa, para así solventar sus medicamentos y estudios.
“La idea fue de mi esposa Lourdes, ella era una visionaria, siempre veía las oportunidades en medio de las crisis. Fue así que en una de las idas para su tratamiento vio un carrito eléctrico que vendía cocido y dijo ‘como quiero para colocar frente a casa y poder vender cocido y chipa’. Yo, como quería cumplir su deseo, vi la manera de comprarle el carrito y como una sorpresa se lo regalé. Al poco tiempo de habilitar el puesto ya teníamos personas que llegaban para desayunar”, contó Luis Cortesi en conversación con La Nación/Nación Media.
Con el tiempo la clientela se iba formalizando y el matrimonio decidió expandir el negocio, pero no tenía muy claro cómo conseguir un local sin tener que invertir mucho dinero. Fue así que tras buscar opciones y pensar en posibles ideas como la de un contenedor, Luis logró dar con un colectivo que estaba en desuso en una parada cerca de su casa y se le ocurrió la idea de convertirlo en un pequeño restaurante.
“Era un colectivo que ya no estaba en funcionamiento; entonces, me acerqué al dueño de la línea y le ofrecí que me lo vendiera. Ya con la ayuda de mi esposa y con algunas ideas inicié la restauración. Empecé a ponerle el sistema eléctrico, a montar la cocina y reutilizamos los asientos. Así fue quedando cada vez más acogedor nuestro nuevo Don Cocido”, relató.
Con el paso de los días y la puesta en funcionamiento del nuevo local, la pareja sentía que necesitaba un toque de color, que los diferenciara y sobre todo que trasladara el amor hacia lo nacional, por lo que le pidieron ayuda al artista Tomás Salinas, quien fue el encargado de plasmar un paisaje campestre paraguayo, muy pintoresco y llamativo.
LOS RETOS
Como a todos los comercios y empresas, la pandemia fue un desafío para Don Cocido, que continuó brindando sus servicios implementando todas las medidas sanitarias. Al levantarse las restricciones, la pareja propietaria atravesó una prueba mayor, el deterioro de la salud de Lourdes.
Si bien el cáncer había estado en recesión durante varios meses, que le permitió a Lourdes culminar una segunda carrera universitaria, además de llevar adelante el negocio de Don Cocido, que había crecido y consolidado su cartera de clientes, lamentablemente la enfermedad avanzó y el año pasado (2023) Lourdes pasó a la vida eterna.
EL LEGADO DE AMOR
“Lourdes era una persona que siempre veía el lado bueno de las cosas y trataba de mantenerse positiva, ya en los últimos días de vida acudimos al padre Aldo Trento, para que nos ayude, porque sentía mucho dolor y en la fundación se encuentra el único centro paliativo del dolor. Mi esposa apenas entró empezó a sentir menos dolor y los siguientes días, hasta su partida, se la veía mucho más aliviada”, recuerda Luis.
Cortesi remarcó que durante su estadía en el hospital de la fundación en varias ocasiones su esposa le insistía que quería desayunar cocido con mbeju y que extrañaba trabajar en el negocio que ambos habían creado, y le sugirió a su esposo traer el carrito más pequeño para vender sus desayunos y permanecer juntos.
“Ella siempre me pedía videos y fotos de cómo estábamos en el local trabajando mientras ella estaba internada. Un día se le ocurrió traer el carrito aquí, a la esquina de la fundación y como siempre le cumplí el deseo. Todos los funcionarios de la zona venían, además de las enfermeras e inclusive el propio padre Trento, quien es fanático del mbeju con cocido”, comentó.
Luego del fallecimiento de Lourdes y por un deseo suyo, Luis trasladó Don Cocido frente a la fundación, donde continúan sirviendo desayunos y donando las ganancias a la fundación como retribución al amor y al servicio que recibió su esposa.
“Ella me pidió que donemos lo recaudado a la fundación, y cumplimos ese pedido todos los meses, desde su partida. Luego de pagar el mantenimiento y los gastos varios del local doy todo lo recaudado, a nosotros este lugar nos ayudó mucho y el deseo de mi querida esposa fue ayudar a los que podemos”, finalizó don Cortesi.
El emprendimiento Don Cocido ha trascendido y pasó de ser un negocio fundado en el amor, a una manera de colaborar con quienes padecen enfermedades terminales y reciben atención de calidad en el centro médico de la fundación San Rafael.
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Productores piden definir si reglamento 1115 será obligatorio o voluntario
Desde la Unión de Gremios de Producción (UGP) siguen socializando la postura gremial desde este sector productivo, ante las exigencias de Unión Europa (UE) y su implementación del reglamento 1115/2023 ya en vigencia, de que todavía hay mucho por entender y por sobre todo, decidir.
Al respecto, el presidente de la UGP, Héctor Cristaldo, señaló que esperan se tome la decisión correcta respecto a esta normativa, puesto que el desarrollo del país está en juego, y que todavía se tiene que definir cómo será la adhesión al requisito para ingresar al mercado europeo.
“Le pedimos al gobierno que analice bien el tema, de cuál será el mecanismo, porque todavía se debe definir si el sistema a utilizar será voluntario o si será obligatorio. Esperemos que podamos tomar una decisión correcta porque el desarrollo del país está en juego”, expresó a la 680.
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Participación de la UE
Hay que mencionar que el 1115 es una normativa que regula el comercio de determinadas materias primas y derivados, cuyo objetivo del reglamento es evitar el ingreso de estos productos, específicamente, los que provengan de territorios deforestados al mercado europeo.
Ante esto, es que los gremios pertenecientes a la actividad de la producción, consideran que ley de la UE es una amenaza al desarrollo del país, por la imposición de los requisitos que según la UGP, atentará contra muchos pequeños productores que todavía no podrán clasificar en el caso de los granos a los provenientes o no de la deforestación.
Asimismo, Cristaldo reiteró la magnitud de la participación del mercado del bloque europeo en las exportaciones graneleras de Paraguay, haciendo alusión que apenas representa el 4 %, pues la UE compró en el 2023 por unos USD 492 millones del total de USD 11.890 millones exportados.
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