En La tempestad, de William Shakespeare, Próspero es un hechicero que gobierna una isla desierta con su hija Miranda. Como ve que es la hora de casar a su hija y planea hacerlo con un príncipe, invoca con sus poderes una gran tormenta marina para hacer naufragar el barco en el que viaja el hijo de un rey.

Tomando elementos de esta obra de teatro publicada en 1611, la directora neoyorquina Diane Paulus (ganadora de un premio Tony) creó para el Cirque du Soleil el universo de Amaluna, espectáculo que estrena en 2012, aunque puntuando la diferencia en el marcado protagonismo que da a las mujeres. Aquí nos transportamos a una isla gobernada por diosas en la que Próspera es la reina y el motivo que la lleva a desencadenar una tempestad es la necesidad de atraer hombres de otras tierras entre quienes su hija Miranda pueda escoger a su futuro esposo.

La protagonista es encarnada por Amanda Zidow, y no, no es acróbata sino músico. Toca el piano y el violonchelo, instrumento que ejecuta como la reina de Amaluna desde hace dos años. Pero ya desde el 2010 esta artista norteamericana de 38 años forma parte del Circo del Sol; antes estuvo en Iris, espectáculo que la compañía canadiense estrenó en Hollywood.

Amaluna se describe como una “celebración acrobática de la divinidad femenina”. ¿Qué entendemos por esto?
Amanda Zidow: La historia está centrada en el empoderamiento de las mujeres. Es una isla de mujeres, donde conviven diferentes personajes femeninos: amazonas, valquirias y diosas, y todas cooperamos para trabajar y convivir en paz. Pero tenemos que lidiar con lo que sucede cuando llegan hombres a la isla, debido a que cuando ellos llegan hacen que las cosas pierdan su equilibrio. Entonces, tenemos que averiguar la forma en la que hombres y mujeres puedan convivir en armonía sin que nosotras perdamos nuestro poder con su presencia.

Próspera y Miranda se inspiran en dos icónicos personajes shakespearianos. ¿Qué más me pueden contar sobre sus papeles?

Anudari Ganbar: Miranda es muy inocente y es un personaje muy bonito. Estoy muy contenta de poder interpretarla. Próspera es mi madre y soy como la princesa en Amaluna, voy a conocer a Romeo (como en Romeo y Julieta); estoy muy emocionada en cada momento del show.

Amanda: Yo soy la reina de la isla y una hechicera. Mi trabajo es asegurarme de que todo en la isla vaya bien pero mi asunto más importante es Miranda, mi hija, así que le estoy organizando una gran fiesta para celebrar su cumpleaños (como “quinceañera”). Por lo tanto, esta es su transición de niña a mujer, así que mi objetivo con esta fiesta es ayudarle a encontrar el amor de verdad. Pero como no tenemos hombres en la isla, causo una gran tormenta -y eso es directamente de La tempestad– para hacer naufragar un barco que navega lleno de hombres. De allí escapa Romeo, de quien Miranda se enamora apenas lo conoce. Pero yo, como su madre, tengo que estar segura de que ella no se esté apresurando, de que esté tomándose su tiempo. Por eso, con las otras diosas, organizamos una serie de pruebas que les exigimos pasar juntos para para demostrar su amor.

¿Qué tipo de entrenamiento te exige este espectáculo?
Amanda: Para mí, el entrenamiento es algo de todos los días. Como músico, empecé a practicar cuando tenía 4 años. Así que comencé con piano, luego me trasladé al violonchelo y años después fui a una escuela de música, centrándome en la voz y el violonchelo. Este show, específicamente, me requirió mucha preparación para el personaje, porque nunca había actuado antes; así que para interpretar a Próspera tuve que tomar clases de actuación, con un coach que me hiciera practicar varias horas diariamente. También necesito muchas horas al día para entrenar mi voz, especialmente en este papel en el cual tengo canciones en las que canto muy bajo en un momento y muy alto en otro, así que requiere un entrenamiento vocal importante. Y el personaje tiene que ser muy fuerte, muy potente pero, a la vez, muy tranquilo. Eso requiere mucha formación en algo que era completamente extraño para mí como la actuación.

Anudari: En el espectáculo hago contorsiones, balanceo sobre una mano y el acto del cuenco de agua. Para eso debo entrenar todos los días, pero tenemos un día de descanso por semana, y para el espectáculo tengo un entrenador personal durante cuatro horas diarias. Cuando estamos en temporada, siento que estoy entrenando todo el tiempo.

Como músico, Amanda, ¿alguna vez te imaginaste que terminarías trabajando en el Cirque du Soleil?
Amanda: Bueno, cuando vi por primera vez un espectáculo del Cirque du Soleil tenía 12 años de edad y quedé simplemente enamorada. Para mí ver en aquel entonces que tenían músicos en vivo, en el escenario, fue algo que me impactó. Era raro ver que den tanto destaque a los músicos, y esto es algo que se da especialmente en Amaluna. Hoy, siendo parte del único show del Cirque… donde la banda musical está conformada íntegramente por mujeres, me siento muy orgullosa. Ser una artista del Cirque du Soleil es extraordinario.

¿Y cómo pasó esto?
Amanda: Fue mediante una audición. He estado en dos shows del Cirque… así que, ya para el primero, tuve que pasar varias rondas de audiciones y después volar a Montreal para hacer una audición en vivo. Así que fueron muchas… muchas audiciones.

¿Y en el caso de Anudari…?

Anudari: Cuando tenía 11 años vi el primer casting en Mongolia pero no participé, ¡tenía solo 11! Pero desde entonces ya estaba soñando con ser parte del Cirque. Era mi trabajo soñado, especialmente Amaluna, desde el principio soñaba con este espectáculo donde había actos en el cuenco de agua. Por eso, creo que si tenemos un sueño se hará realidad. Si realmente deseás algo desde tu corazón, va a suceder. Yo estoy muy feliz. También tuve que participar de varias audiciones, fue difícil ¡pero conseguí el trabajo! Hace un año me uní al Circo.

¿Qué hace de Amaluna un espectáculo único y diferente de los demás de la compañía canadiense?
Amanda: Lo más especial de Amaluna es que es un espectáculo que se centra en las mujeres. Es el único show en el que tenemos un elenco donde la mayoría son mujeres y también todos los músicos lo son. Es muy singular porque celebra el poder de la mujer, la feminidad, y también es un espectáculo único con una historia, es un argumento con el que todos se pueden identificar. Toca temas universales como el amor entre un hombre y una mujer, el amor de una madre hacia su hija, lo que implica para una madre dejar ir a su hija. Creo que eso es algo que muchas madres pueden entender.

Para cerrar, ¿cuál es la parte favorita del show para cada una?
Anudari: Para mí el momento en el cuenco de agua porque se convirtió en mi acto central. También la parte de la “Celebración”, porque es una parte muy feliz y todo el mundo se reúne.

Amanda: Mi momento preferido es la tormenta. Cuando mi personaje, Próspera, inicia la tormenta. Es un momento muy oscuro en el espectáculo y, a la vez, la tormenta lo cambia todo. Porque es a partir de ella que los hombres llegan a la isla. Así que este es el comienzo de todo; lo que pone en marcha todo lo que va a suceder en el show. Es un momento muy fuerte para mi personaje, donde Próspera demuestra todo su poder, y es muy diferente del resto del espectáculo. Y también “Celebración”, cuando Miranda y Romeo finalmente están juntos, se casan y, bueno, ya todos están felices.