José del Carmen Abril, de la Asociación Campesina del Catatumbo (Ascamcat) y cocalero, su hijo Carlos, y Eiber Andrade, ambos exguerrilleros. Foto: AFP.
Raspachines, el eslabón más débil del narcotráfico en Colombia
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Cuando José del Carmen Abril era joven, en las montañas del Catatumbo solo se sembraban alimentos. Pero, entonces, llegó la hoja de coca para transformar el paisaje y desangrar esta región colombiana limítrofe con Venezuela. El hombre de ojos claros y barba tenue es hoy uno de los cientos de miles de campesinos que siembran la planta de la que se extrae la cocaína. Machete en mano, a sus 53 años, cuida su cultivo de las plagas y deshoja a mano limpia los arbustos.
“Carmito”, como es conocido aquí, es descendiente de los colonos que llegaron a esta zona para dedicarse a la agricultura. A finales de los 80, se sembraron las primeras plantas de coca. Hoy, Catatumbo es una de las regiones con más narcocultivos en el mundo y un laboratorio de la fallida represión del narcotráfico.
Hay unas 42.500 hectáreas según la ONU, el 30% del total sembrado en Colombia, el mayor productor global de cocaína que rompió su propio récord en el 2021. Abril recorre su cultivo en compañía de la AFP. Distribuidos alrededor de una casa de barro, los árboles le llegan hasta la cintura. Con las cosechas crió ocho hijos.
“La coca para los campesinos desde el 1986 para acá se convirtió en ‘el gobierno’ (...) porque la coca es con la que se ha llegado hacer escuelas, hacer puestos de salud, carreteras; hacer viviendas”, sostiene. Hasta el 2018, la ONU estimaba que unas 201.000 familias se dedicaban al cultivo, poco más de un millón de personas, lo que a la fecha representaría el 2% de los 50 millones de colombianos.
Ni salario mínimo
Lejos de los lujos y excesos de los narcotraficantes, la coca apenas asegura a los campesinos su sobrevivencia. Abril lidera una cruzada para diferenciar entre los cocaleros, el eslabón más débil de la cadena, y los narcos que sacan la cocaína al exterior. Los campesinos “no son narcotraficantes, son jornaleros (trabajadores) recolectando (...) y no tienen ni salario mínimo”, dice.
Conocidos como raspachines, los recolectores que deshojan a mano la coca en Catatumbo se quedan con la mínima parte del negocio. Otra porción va para los “químicos”, quienes procesan la hoja picada con cal, cemento, gasolina y sulfato de amonio para obtener la pasta base de la cocaína. Pero son los narcos los que se enriquecen poniendo los cargamentos en los puertos. En las regiones cocaleras las guerrillas son el poder de facto. Compran el kilo de pasta a unos 370 dólares. De ahí la materia prima viaja hasta los cristalizaderos, donde se transforma en polvo blanco.
El centro de estudios Insight Crime estima que en las calles de Colombia un kilo de cocaína cuesta unos 994 dólares. En Estados Unidos y Europa, los principales consumidores, asciende a 28.000 y 40.000 respectivamente. Durante décadas, los cocaleros han sido blanco de la guerra contra las drogas. Aviones han arrojado millones de litros de glifosato sobre los plantíos, y miles de cultivadores han sido asesinados o encarcelados.
Estrategias, dice Abril, desacertadas. “Cada vez que muere un campesino por sembrar coca aparecen dos”, remarca. El gobierno izquierdista de Gustavo Petro se comprometió en diciembre a dejar de perseguir a los campesinos con menos de dos hectáreas de coca.
Más de 16.000 personas, el 17% de los encarcelados, están tras las rejas sindicadas o condenadas por tráfico, fabricación o porte de estupefacientes, según el sistema penitenciario. En este tiempo también han sido abatidos o detenidos cientos de capos del narco, pero “siempre hay quien lo compre (la coca), así sea poquito, pero alguno llega”, agrega “Carmito”.
Los derechos humanos
Abril, que tiene cerca de seis hectáreas de coca, solo es dueño de los cultivos, porque la tierra le pertenece a un finquero, que recibe por el “alquiler” una cosecha de las cinco que se producen al año. Un raspachín experto puede ganar hasta 37 dólares por jornada, en un país con un salario mínimo de ocho dólares diarios.
La comunidad ha tenido que “enfrentar y soportar los azotes” de los armados, comenta Abril. En el 2002, paramilitares de ultraderecha ahuyentaron a fuego a la entonces guerrilla de las FARC en el Catatumbo. Unas 160 familias, incluida la de Abril, se vieron forzados a huir. “A muchos los mataron, a otros se los llevaron y los torturaron, a las mujeres las violaron”, recuerda.
Cuando regresaron, se encontraron con sus animales muertos y los arbustos de coca en pie. Con el Estado “se hicieron los acuerdos de regreso, que con nosotros venía la salud, educación, vivienda (...) y a esta hora, no ha llegado”.
Abril emergió entonces como un líder en defensa de los cocaleros ante las autoridades que erradican a la fuerza sus cultivos. “Yo defiendo los derechos humanos”, dice su camiseta. En el 2010, denuncia, el ejército lo acusó falsamente de ser parte de las filas rebeldes. “La coca se convirtió en un problema para los que no quieren invertir en el campo”, señala.
El mandatario Santiago Peña, en su carácter de Comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de la Nación, encabezó este martes la apertura de la Conferencia de Jefes de las Fuerzas Aéreas Americanas 2025. Foto: Gentileza
Paraguay pide voluntad conjunta en la región para proteger el espacio aéreo
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El mandatario Santiago Peña en su carácter de Comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de la Nación, encabezó este martes la apertura de la Conferencia de Jefes de las Fuerzas Aéreas Americanas 2025. En esta ocasión, la Fuerza Aérea Paraguaya propuso impulsar estrategias conjuntas para la vigilancia, control y la protección del espacio aéreo contra vuelos ilícitos y el crimen organizado transnacional.
“Hoy Asunción es el centro de integración de las Fuerzas Aéreas Americanas que tiene la responsabilidad de brindar seguridad desde el espacio a todos los habitantes de estas tierras. Valoro este foro porque en el mismo nos encontramos a pesar de nuestras diferencias, para unirnos y cooperar por encima de fronteras, ideologías o coyunturas circunstanciales. Hoy enfrentamos un mundo en constante transformación donde los desafíos a la seguridad no reconoce fronteras”, indicó Peña.
El jefe de Estado siguió sosteniendo que “reafirmamos con vigor los valores profundos que nos une, la solidaridad, confianza mutua y la búsqueda colectiva por la paz y la seguridad hemisférica. Paraguay valora inmensamente el rol del sistema de cooperación de las Fuerzas Aéreas Americanas como una herramienta técnica y operativa para la integración de nuestras capacidades”.
Peña señaló que el carácter apolitíco y profesional de las Fuerzas Aéreas Americanas es una garantía de “neutralidad, eficacia y permanencia incluso en contextos internacionales complejos como nos toca vivir hoy en día. Nuestro compromiso como Estado desde el Paraguay es firme, fortalecer la cooperación internacional en defensa aérea, apoyar el desarrollo de capacidades conjuntas y seguir apostando por el diálogo multilateral como vía para la estabilidad y la paz duradera”.
El mandatario acotó: “celebro muy entusiastamente el enfoque de esta conferencia contra nuestro enemigo principal en la actualidad. Estos desafíos nos exigenno solo firmeza interna, sino voluntad de actuar en conjunto con nuestros aliados de toda la región. El narcotráfico, el crimen organizado no respetan fronteras, límites ni países, es más se aprovechan de nuestras debilidades. Debemos unirnos y trabajar de forma coordinada y sistemática para enfrentar estos flagelos“.
El mandatario Santiago Peña en su carácter de Comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de la Nación, encabezó este martes la apertura de la Conferencia de Jefes de las Fuerzas Aéreas Americanas 2025. Foto: Gentileza
Esta actividad está organizada por el Sistema de Cooperación entre las Fuerzas Aéreas Americanas, compuesto por 23 Fuerzas Aéreas de América, incluyendo a Argentina, Belice, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Guyana, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.
“La presencia del presidente de la República, Santiago Peña reafirma su compromiso con la seguridad nacional y regional así como la lucha contra el crimen transnacional organizado y el fortalecimiento de nuestras capacidades en materia de seguridad y defensa", comentó el comandante de la Fuerza Aérea Paraguaya, Julio Fullaondo.
El Sistema de Cooperación entre las Fuerzas Aéreas Americanas fue creado el 16 de abril de 1961. Su principal finalidad es promover y fortalecer los lazos de amistad, cooperación y apoyo mutuo entre sus miembros, orientándose hacia el intercambio de experiencias, medios, entrenamiento e instrucción de personal, facilitando así la elaboración de procedimientos para actuar de manera integrada, en cumplimiento de lo dispuesto por los respectivos gobiernos.
“Ponemos a consideración de los países miembros que en las reuniones bilaterales se pueda abordar el fortalecimiento de la seguridad del espacio aéreo regional, esto podría incluir las firmas de convenios o acuerdos referentes al intercambio de informaciones y la aplicación de protocolos de interceptación de vuelos ilícitos", indicó.
Asimismo siguió sosteniendo que “de esta manera lograremos robustecer nuestras capacidades para el trabajo conjunto y hacer frente a la lucha contra los vuelos ilícitos y el crimen transnacional organizado, un mal que afecta significativamente nuestra región sin respetar fronteras. La lucha contra los delitos transnacionales requiere de un esfuerzo coordinado y sostenido mediante la aplicación de tecnologías avanzadas para la vigilancia y protección de nuestro espacio aéreo para enfrentar las amenazas de manera efectiva“.
Banda mexicana lanza canción antinarco tras enaltecer al cartel
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Guadalajara, México. AFP.
La banda mexicana Los Alegres del Barranco difundió una canción que advierte sobre los peligros del narcotráfico y con la que buscan suspender la acusación formal que enfrentan por, supuestamente, enaltecer a un capo de la droga. La canción se titula “El Consejo” y en sus versos alerta que una vez dentro del narcotráfico “solo quedan dos caminos: el del panteón o la cárcel”.
Hace un mes la Fiscalía del estado de Jalisco (oeste) acusó al grupo musical de “apología del delito” por haber interpretado una composición que ensalzaba a Nemesio Oseguera, líder del poderoso Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), denominado como “organización terrorista extranjera” por el gobierno de Estados Unidos en febrero.
“Al emitir un mensaje positivo con una canción, se abre la posibilidad a la eventual suspensión al proceso”, informó la Fiscalía en un comunicado. Sin embargo, la Fiscalía aclaró que otras investigaciones contra el conjunto musical por operaciones con recursos de procedencia ilícita se mantienen vigentes.
A medida que crece la popularidad de los narcocorridos, un subgénero de la música regional mexicana, varios estados del país los han proscrito, lo que incluye su difusión pública. Los intérpretes de estas piezas también han sido blanco de violencia del crimen organizado. A finales de mayo cinco integrantes del grupo Fugitivo que días antes habían desaparecido fueron hallados asesinados en Tamaulipas (noroeste).
El informe médico señala que “el paciente permanece hemodinámicamente estable y su condición clínica sigue siendo crítica, con pronóstico neurológico reservado”. Foto: AFP
Miguel Uribe fue sometido a nueva cirugía y permanece en estado “crítico”
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El senador y precandidato presidencial de derecha de Colombia, Miguel Uribe Turbay, fue sometido “en las últimas horas a una intervención quirúrgica complementaria al procedimiento inicial”, informaron este lunes desde el hospital Fundación Santa Fe de Bogotá, donde el político permanece internado tras sufrir un atentado el pasado 7 de junio.
El legislador “ha continuado su manejo en la unidad de cuidados intensivos, subespecializada en Neurología, con monitoreo permanente de todos los parámetros pertinentes”, indica el reporte brindado esta mañana sobre la situación clínica de Uribe y publicado por el portal eltiempo.com.
Añade que “el paciente permanece hemodinámicamente estable y su condición clínica sigue siendo crítica, con pronóstico neurológico reservado”. El senador fue sometido a un control tomográfico cerebral postoperatorio que “evidencia los resultados esperados sin observarse cambios significativos adicionales a los previamente identificados”, menciona.
Marcha
Miles de personas marcharon en las principales ciudades de Colombia ayer domingo en señal de repulsa ante el atentado contra el precandidato presidencial de derecha Miguel Uribe. El senador de 39 años recibió tres disparos durante un acto público en un barrio popular de Bogotá. El ataque despertó recuerdos de violencia y el terror ejercido por el capo de la cocaína Pablo Escobar contra políticos en las décadas de los 80 y 90.
“Tenemos un senador que está peleando entre la vida y la muerte y queremos que salga adelante”, dijo a la AFP Miguel Calderón, un maestro de 43 años, presente en la marcha de Bogotá. Y “que no se tome la violencia como una salida a toda esta situación”, agregó.
Miles de personas llenaron calles y plazas con camisetas blancas y banderas de Colombia por la paz. “Éxito en la plaza de Bogotá. Un pueblo unido por la paz”, dijo el presidente Gustavo Petro en X. La Policía ya ha detenido a tres supuestos implicados en el crimen. Un adolescente de 15 años está acusado de ser el autor material del atentado, mientras que un adulto es sospechoso de ser responsable de la “logística” del ataque.
Las autoridades colombianas informaron el sábado de la detención de una mujer en el sur del país, aunque no dieron detalles de su supuesto papel en el ataque. Según el periódico El Tiempo, uno de los detenidos aseguró que el autor intelectual del atentado reside en Ecuador. El expresidente (2002-2010) y líder de la derecha del país, Álvaro Uribe Vélez, quien no tiene parentesco con el senador atacado, participó en la protesta fuertemente custodiado por escoltas.
El escritor colombiano Fabio Martínez estuvo recientemente en Asunción para presentar su libro “La búsqueda del paraíso. Una biografía de Jorge Isaacs”. Se trata de una crónica de no ficción en la que de manera novelada cuenta la historia del destacado escritor romántico, quien en su faceta de político se pronunció a favor de la causa paraguaya durante la guerra contra la Triple Alianza. En esta entrevista con La Nación/Nación Media, el autor caleño nos cuenta sobre lo que representó Isaacs más allá de la novela “María” y de la hermandad entre nuestros países.
–¿Cómo empieza su interés hacia la figura de Jorge Isaacs?
–Yo escribí una biografía de Isaacs porque la institucionalidad de la época en su momento invisibilizó la vida y la vida política del escritor. Al investigar la vida de este personaje llegué a la conclusión de que es uno de los intelectuales más importantes no solo de Colombia, sino de América. Cuando él publica la novela “María” en 1867 enseguida se convierte en una especie de best-seller desde España, pasando por México, Centroamérica, Venezuela, Perú, Paraguay, Uruguay y Argentina. En los currículos académicos de las escuelas y de los colegios de bachillerato estaba vigente la novela “María”. Hace poco tuve la oportunidad de visitar Paraguay y varias personas se me acercaron y me dijeron que habían leído “María”. Mi interés pasa primero porque es paisano. Él nació en Cali, la tercera ciudad colombiana, que está situada en el suroccidente del país y en segundo lugar por ese ninguneo que hubo sobre su vida política, su vida también como científico, etc., que fue muy interesante. En Colombia muchas generaciones hemos leído “María”, pero no se conocía su vida como tal, que está articulada a su obra literaria. Entonces, ese fue mi interés por rescatar esa vida tan importante que tuvo la segunda mitad del siglo XIX.
SOLIDARIDAD
–A pesar de ser una figura descollante de las letras latinoamericanas, se sabe muy poco del vínculo de Jorge Isaacs con el Paraguay. ¿Podría hablarnos sobre cuál fue la posición del escritor respecto a un acontecimiento que marcó la historia de nuestro país?
–En 1868 Isaacs fue elegido representante en la Cámara y como él tenía una relación fluida epistolar con los principales intelectuales de América Latina se informó de esa guerra terrible, la famosa guerra de la Triple Alianza contra la nueva República del Paraguay. Enseguida empezó a establecer relaciones con los intelectuales de la época y promulgó en el Congreso de la República la ley 78 de 1870, donde se plantea de una manera clara que Colombia se solidariza con el pueblo paraguayo. Fue el primer país que realmente se solidarizó con el pueblo paraguayo. Él era un escritor reconocido y es muy posible que él haya redactado este decreto, que es un decreto breve, pero es un decreto de apoyo y solidaridad con el pueblo paraguayo. Yo diría que a partir de esa fecha es que se inician las relaciones de hermandad entre Colombia y Paraguay. Es muy importante que recordemos ese decreto tanto en Paraguay como en Colombia porque hace parte de la unidad latinoamericana que tanto necesitamos. En este junio se cumplen 155 años de la firma del decreto en apoyo a los paraguayos y ahí se inician las relaciones de hermandad entre Colombia y Paraguay. Y es algo muy simbólico y muy importante para los dos países.
–A pesar de ser un eminente escritor, en la política Isaacs no tuvo la misma suerte, ¿no?
–Con la Constitución de 1886 de Colombia, Isaacs fue uno de los derrotados políticos. Isaacs comenzó su labor legislativa como miembro del Partido Conservador, como su padre, el señor George Henry Isaacs, pero rápidamente cambió de partido y se unió al Partido Liberal y al Partido Radical. Entonces, el establecimiento lo quiso borrar.
BIOGRAFÍA NOVELADA
–¿Podría hablar de cómo se inició el proceso de elaboración de su libro y de qué género es?
–La obra es una biografía novelada. Pienso yo que ese género cala muy bien en los lectores. Una biografía novelada que está sustentada en la historia colombiana y latinoamericana de la segunda mitad del siglo XIX. Justamente ahí yo menciono el tema de la guerra de la Triple Alianza con Paraguay y el decreto. Yo en ese momento me encontraba haciendo un doctorado en Semiología en la Universidad de Quebec en Montreal, Canadá, y mis horas del día las pasaba fundamentalmente en la biblioteca. Allí descubrí un libro muy interesante de un académico norteamericano, Donald McGrady, que estaba dedicado justamente a la vida de Jorge Isaacs, cosa que no existía en Colombia. Enseguida me acerqué a una primera biografía que había escrito (Luis Carlos) Velasco Madriñán y cuando regresé a Colombia dediqué varios meses a investigar sobre ese periodo histórico, que es tan importante para Colombia y para América Latina, porque en ese periodo se empiezan a consolidar las nuevas naciones latinoamericanas que se independizaron de España. Entonces, me zambullí en la historia política y cultural de la segunda mitad del siglo XIX y de allí rescaté una serie de documentos que me dieron claridad sobre algo contundente: que Jorge Isaacs había sido más y había hecho más cosas que la novela “María”, que había sido un personaje emblemático, un ícono de la cultura hispanoamericana. Entonces, el mejor género para hacer esto es una biografía novelada, porque es un estilo grato, casi una crónica, como se dice en el mundo del periodismo, una crónica larga sustentada en hechos históricos de la época, en archivos y documentos.
Jorge Isaacs, el prolífico intelectual que soñó con transformar la sociedad a través de la política
PARAÍSO
–Yendo un poco a lo que es el título del libro, ¿cuál es ese paraíso al que hace alusión?
–Esa idea del paraíso viene desde Colón. Él en uno de los diarios dice explícitamente que ha llegado al paraíso terrestre. Por supuesto, América en el siglo XV era un paraíso con una naturaleza exuberante, con el paisaje, con los ríos, los mares, los valles, las montañas. En 1815, cuando Simón Bolívar se dirige a Kingston, en Jamaica, allí conoce al señor George Henry Isaacs, el futuro padre de Jorge de Isaacs, y él le habla de que lo invita a que visite el país que se va forjando aquí. Pero como yo digo en uno de los apartes de la novela, no hay paraíso sin serpientes. Entonces, esta idea del paraíso siempre ha existido en todas las épocas. A nadie se le ocurre hacer un viaje hacia el infierno, aunque hay seres humanos que lo han hecho y lo siguen haciendo . Entonces, el título de mi libro viene por ese imaginario que a través de toda la historia de la humanidad siempre se ha constituido como el gran topos, el gran lugar donde todos tenemos que llegar, la búsqueda del paraíso.
–Isaacs fue hijo de un rico hacendado caído en desgracia luego de la abolición de la esclavitud. ¿Cómo influyeron en su obra estos acontecimientos de su vida?
–El señor George Henry Isaacs se entronca directamente con las élites terratenientes de la época, compra tierras e incluso llega a tener unas tres haciendas. Entre ellas está la famosa hacienda El Paraíso, que queda a 70 kilómetros de Cali y donde transcurrió la novela “María”. Hoy en día es un museo nacional muy visitado por colombianos y latinoamericanos. Yo siempre he dicho que nuestros países surgieron a raíz de las estancias. Esa fue la primera conglomeración de tipo social y económica que permitió más adelante que estos territorios se constituyeran en naciones independientes después de la guerra de liberación de España y Portugal. Entonces, él se entronca directamente con las élites, pero se produce inmediatamente la liberación de los esclavos, que sustentaban el trabajo en estas haciendas. Entonces, eso produce una crisis económica. El señor George Henry Isaacs quiebra económicamente. Él tenía pensado en vida enviar al joven Jorge Isaacs a estudiar medicina en Londres y ante la quiebra no lo puede hacer y deja a la viuda, doña Manuelita Ferrer, una cantidad de deuda. Esa crisis hace que el joven novelista se siente a escribir, él toma un poco la escritura como una especie de catarsis. Efectivamente, en la novela, si bien es cierto en la vida real él no hace el viaje a Londres, el personaje literario Efraín, que es una especie de alter ego, sí viaja a Londres a estudiar medicina y es ahí donde recibe esa fatal noticia a través de una carta de que su novia María ya estaba enferma. Entonces, él realiza un viaje de regreso, llega por el Pacífico al puerto de Buenaventura. En esa época no existía el canal de Panamá, sino que tenía que bajar al sur del continente y atravesar del Atlántico al Pacífico y cuando llega a la hacienda El Paraíso le encuentra muerta. Por eso es una novela romántica.
La hacienda El Paraíso, el escenario donde transcurre la novela “María”, es un ícono de la cultura vallecaucana y bien de interés cultural
ILUSTRACIÓN
–¿Qué ocurre luego del éxito de la novela?
–Después de la publicación de “María”, él se mete de lleno en la política. El joven Isaacs es un hombre culto, es un hombre ilustrado. En su casa de Cali tenía una gran biblioteca y es allí donde se vincula al mundo de la política. Él era un personaje ilustrado que quería ayudar a la construcción de estas naciones que estaban un poco a la deriva todavía. Si bien es cierto eran ricas en lo económico, todavía no tenían un Estado sólido ni habían configurado un Estado democrático importante que pudiera estar al frente de las soluciones de los problemas del país. Lo que yo descubro en la biografía, y guardando las distancias, es que Isaacs fue un poco nuestro Gabriel García Márquez de la segunda mitad del siglo XIX. Así, era necesario reivindicar su historia de vida.
“EN ASUNCIÓN ME SENTÍ COMO EN CASA”
Al tiempo de recordar a figuras de la cultura paraguaya como Augusto Roa Bastos y Rubén Bareiro Saguier, Martínez destaca de su visita la cordialidad con la que fue recibido y subraya la necesidad de que nuestros países asuman posiciones en bloque en el seno de los espacios de decisión de la comunidad internacional.
“Yo no conocía Asunción, yo no conocía Paraguay. Lo conocí a través del maestro que ustedes tienen de la literatura paraguaya, Augusto Roa Bastos, porque en los años 80 lo leíamos. Cuando estuve como estudiante en la Universidad de la Sorbona en París fue a darnos una conferencia a unos 20 estudiantes que veníamos de todas partes del mundo. Fue una charla muy acogedora, era un hombre muy culto, muy noble, muy humilde, muy sencillo. Para mí desde los años 80 Roa Bastos fue un gran referente de la literatura hispanoamericana. En ese mismo ciclo de estudios también conocí a Rubén Bareiro Saguier, un intelectual y académico paraguayo. Estuve en la Feria del Libro y me acordé de él porque en una de las librerías había una fotografía grande de él. Quiero decir que estoy muy agradecido por la invitación que me hizo la Embajada de Colombia en Asunción, con los organizadores de la Cámara del Libro de Asunción también y estoy muy agradecido con los paraguayos y paraguayas que tuve la oportunidad de conocer. En Asunción yo me sentí como en casa, yo no me sentí un extranjero. Los viajes literarios sirven justamente para eso, para unir. Hoy más que nunca los colombianos y los paraguayos tenemos que continuar afianzando esas relaciones de hermandad que tenemos desde el siglo antepasado a través de proyectos de tipo económico, energético, etc., y también a través de proyectos y convenios interculturales, sobre todo en estos tiempos en los que los países se expresan unitariamente en forma de bloques. Nosotros estamos en la necesidad de unificarnos, de cumplir con el sueño latinoamericano que alguna vez planteó el libertador Simón Bolívar”, concluyó.