“Caraduras, mentirosos, payasos”, fue­ron las agresiones lanzadas por la senadora Celeste Ama­rilla contra de los conven­cionales del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), quienes se agruparon ayer domingo con la finalidad de aprobar el pedido de la disi­dencia consistente en desdo­blar las elecciones internas de los comicios municipales previstos para el 2026.

Lejos de proponer alternati­vas de solución a la crisis polí­tica y financiera que sacude a la principal agrupación de oposición, la polémica par­lamentaria aprovechó la oca­sión para lanzar un discurso de odio y de división entre paraguayos.

“El partido necesita que sean lobos con los colorados y no ovejas. Acá el Partido Colorado es el enemigo”, afirmó. Sus afirmaciones no lograron sumar adep­tos y desataron la ira de las máximas autoridades par­tidarias quienes termina­ron por abuchearla.

La desaprobación oca­sionó que Amarilla redoble sus insultos indicando que “quiero ver si así le gritan a los colorados, yo sí soy valiente y pueden seguir gritando, sigan gritando. Me peleo con ene­migos de mi altura, no me peleo con correligionarios. Acá el enemigo es Horacio Cartes, ni siquiera es San­tiago Peña”, afirmó.

Incluso la congresista se dirigió a uno de los convencionales quien cues­tionaba sus expresiones, fuera del principal motivo que los impulsó a conglo­merarse. “Usted se pone a gritar a una mujer, viejo ridículo. El que no quiere un cambio en este momento es porque quiere que siga el coloradismo, el cartismo”, sentenció.

Con 418, de los 602 conven­cionales, se abrió la asam­blea extraordinaria del Par­tido Liberal con dos puntos del orden del día; el pri­mero, el desdoblamiento de las elecciones internas partidarias de las eleccio­nes internas municipales de 2026; segundo, la reforma del estatuto partidario, cuyo principal punto es la obliga­toriedad de la renuncia del presidente del PLRA, en el caso de que presente can­didatura para la Presiden­cia de la República, en un periodo de seis meses antes de los comicios.