Francisco Correa, considerado como el cerebro en el asesinato del fiscal Marcelo Pecci, declaró en su audiencia que presuntamente el expresidente de la República Horacio Cartes sería uno de los implicados en el caso. Tras la declaración del sicario, se dejó entrever que no vio ni escuchó nada de las aseveraciones realizadas, sino que solo se basó en dichos de otras personas, lo cual también confirmó el abogado de la familia Pecci, Francisco Bernate.
“Aquí él no dice que tiene un conocimiento directo sobre el hecho, dice solo que le dijeron que estas personas estarían detrás de ese crimen”, remarcó Bernate en la Mega TV con respecto a las declaraciones de Correa.
Más allá de la falta de argumentaciones que sustenten su declaración, el abogado Óscar Tuma también dejó entrever que las expresiones de Correa no pueden ser consideradas como una prueba irrefutable del caso, teniendo en cuenta que declaró solicitando ser acogido por el principio de oportunidad, en ausencia de cualquier corroboración de sus dichos.
Correa está acusado por homicidio agravado y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, ya que presuntamente habría articulado y planeado el homicidio del fiscal Marcelo Pecci en Colombia, desde la ciudad de Medellín, siendo así el cerebro del crimen.
Ante esto, el ministro Juan Carlos Baruja enfatizó en el perfil delincuencial de Correa, para desechar cualquier veracidad sobre sus declaraciones. “Es un delincuente que fue descubierto, una persona que fue implicada en un hecho delictivo, para mí es irrelevante”, señaló el secretario de Estado.
Más allá de la falta de sustento por parte de Correa y la nula corroboración de sus expresiones, el fiscal de Asuntos Internacionales, Manuel Doldán, también había referido que la declaración del sicario es totalmente contraria a las que anteriormente había brindado, acentuando el cambio abrupto en su audiencia. Además, Doldán afirmó que ni siquiera existe algún elemento complementario sobre las declaraciones de Correa en Paraguay y mucho menos en Colombia.