Este es un título que trata de explicar solo toda la historia que ahora desarrollamos y creo que lo logra.

Enterado de la visita del embajador de Estados Unidos al Palacio de López, Abdo llamó con nervioso entusiasmo a sus colaboradores del PDP y les pidió que filtren a Abc la información sobre el contrato del hijo de Fretes de manera de meter en un solo paquete el efecto de la visita del representante de EEUU, cuya intención –como más tarde se observó– era anunciar una importante ayuda como recompensa para llegar a los autores del asesinato del fiscal Marcelo Pecci en Colombia.

Marito sabe que perdió todo y entre ese todo, cualquier tipo de credibilidad. Y como tampoco tiene escrúpulos, aprovechó la visita del diplomático para hacer coincidir con la filtración del documento, aseguran fuentes del mismo Palacio. De ello se deduce que a Marito nunca le importó la memoria de Pecci ni su sacrificio en aras de la lucha contra el crimen, sino sencillamente su pelea política interna con Santi Peña, cuestión que es su única ocupación como presidente hace ya tres años.

Por lo que decimos sobre la credibilidad de Abdo (que es un hecho científico que se lee en las encuestas), se le fue la mano con este capítulo, ya que un gobierno con cierto pensamiento diplomático no provocaría semejante aparatosidad mediática el mismo día del anuncio de una ayuda tan generosa. O puede que, en el fondo, el Presidente ya perdió todos sus límites. De hecho, esta semana estuvo grabando videos y anunciando obras de gobierno como parte de su campaña presidencial.

EL CLARO OBJETIVO

El claro objetivo de Abdo, que a esta altura ya lo advierten hasta los más distraídos, las vacas de Misiones y los pescados del río Paraguay, aparte de las embajadas, es tratar –por todos los medios– de cambiar a la fiscal general y poner un propio fiscal que le ayude con las elecciones e impida algo que parece inevitable, la victoria de Santiago Peña en las dos elecciones.

La pregunta es: ¿todos, paraguayos y extranjeros, seremos testigos pasivos sobre cómo Abdo manipula al Estado, cada vez más groseramente, solo porque no quiere perder unas elecciones? Qué mensaje estamos transmitiendo sino el del desprecio absoluto por la democracia.

Y como tampoco tiene escrúpulos, aprovechó la visita del diplomático para hacer coincidir con la filtración del documento, aseguran fuentes del mismo Palacio.

De ello se deduce que a Marito nunca le importó la memoria de Pecci ni su sacrificio en aras de la lucha contra el crimen, sino sencillamente su pelea política interna con Santi Peña.