Tras la inhumación de los restos de su hermano José Carlos, baleado por sicarios la semana pasada en Pedro Juan Caballero y que per­dió la vida a consecuencia de dicho ataque, el gobernador del departamento de Amam­bay, Ronald Acevedo, dijo que la situación está siendo muy difícil para su familia.

Confesó que están muy des­orientados, pero añadió que van a tratar de ponerse en condiciones para continuar el trabajo, tanto desde la Muni­cipalidad, como en la Gober­nación.

Además, remarcó que no con­fía en el trabajo que pueda hacer la Policía Nacional para esclarecer el asesinato de José Carlos, subrayando el también homicidio de su hija a manos de sicarios y cuya investigación “nunca se hizo en forma”.

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“No tengo tanta confianza en lo que puedan hacer, ya no lo hicieron con el caso de mi hija y ahora pongo en duda todo lo que vayan a hacer con el caso de mi hermano. Tuve una mala experiencia con el caso de mi hija, hay que ver qué hacen ahora. Así como están las cosas no tiene mi confianza la Policía Nacional. Todos los ciudadanos temen ahora por su vida debido a esta inseguri­dad que hay”, sentenció.

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