- Desapercibido, el efrainista Casimiro González, de humilde cuna de agricultores, y su actual esposa, también de origen modesto, a quien el jefe comunal contrató para gestionar pensión de adultos mayores, experimentaron meteórico ascenso económico. El político, con una constructora que no falta en obras de la comuna; mientras que la señora, con sueldo desconocido y registros de viáticos de G. 500 mil en la municipalidad, salió a montar miniinmobiliaria y en plena pandemia erigió edificio valuado en G. 1.200 millones.
- Por Silvia Aguilar
- silvia.aguilar@gruponancion.com.py
Casimiro Néstor González volvió a ser reelecto como intendente de Ybytymí del departamento de Paraguarí por tercer período consecutivo. Lleva a cuestas una serie de cuestionamientos sobre su manejo dentro de la municipalidad. A esto se suma su dudoso patrimonio, por cierto, sin declaración al asumir el cargo.
Los papeles consignan crecimiento exponencial del intendente después de asumir el cargo, prosperidad que le alcanzó a su esposa, Estela Ayala, que fue contratada por el jefe comunal en la municipalidad a su cargo para atender a los adultos mayores.
Los registros salariales de la mujer permanecen ocultos, solo está a la vista en el portal de Transparencia de la municipalidad que percibía viático de G. 500.000 y con esto hizo maravillas.
Casimiro González, proveniente de una familia de humildes agricultores, nos comentó durante una entrevista que trabajó en el Ministerio de Obras Públicas desde el 2009 hasta el 2010, justo antes de subir como jefe comunal.
Era un modesto docente que tenía un ingreso de poco más de G. 2 millones y con este historial hizo magia en sus finanzas que hasta creó su propia empresa de construcción de nombre Obrar SRL en el 2008, precisamente una de las firmas que todo el tiempo es invitada a las licitaciones municipales; es decir, Casimiro se invita a sí mismo en los llamados.
El matrimonio lleva una vida de prosperidad, Casimiro González, en tres declaraciones juradas al dejar el cargo con sueldo de G. 5 millones como intendente y G. 6 millones de honorarios profesiones desconocidos, sin deudas, registró 8 propiedades importantes, una de ellas es un complejo de casas en Ybytymí en 13 hectáreas. En el 2021, al asumir su tercer período de mandato, ya declaró una deuda de G. 810 millones y un patrimonio neto de G. 2.523 millones, redujo sus bienes con la deuda, ya que en los anteriores tenía G. 3.295 millones.
El intendente tiene depósitos de materiales en Luque e Ybytymí, rubro que le sirve a su empresa Obrar, presente en obras municipales.
La esposa, que se desplazaba en maltrechos vehículos, se compró un 0 km, además con viáticos de G. 500.000 empezó a amasar bienes y hoy día tiene un miniemprendimiento inmobiliario en Ybytymí.
En plena pandemia, la mujer erigió un moderno edificio de cuatro pisos con estacionamiento subterráneo, que está en etapa de culminación y que, según expertos, lleva una inversión aproximada de G. 1.200.000.000. Los vecinos de Estela Ayala nos comentaron con admiración sobre el edificio que está a punto de terminar debido a que es una mujer de origen modesto, cuya familia se dedicaba a comercializar productos de Clorinda.
“La empresa está construyendo, es una sociedad privada entre ex compañeros de trabajo, la dueña aportó el terreno y se queda con la planta baja”, González intenta desmarcase; sin embargo, él es el primer agente inmobiliario, hasta influencer que promociona la venta de propiedades de su esposa Estela Ayala. De hecho, cuenta con el espacio pertinente, ya que en su propiedad funciona una radio comunitaria, Lámpara 89.7 FM, la cual está a nombre de una asociación donde de vuelta la presidenta es Estela Ayala.
EMPRESA DE INTENDENTE EN OBRAS DE LA MUNICIPALIDAD
Obras promocionadas en la página de Facebook de la Municipalidad de Ybytymí muestran trabajos con maquinarias y camión Scania con chapa BRX 486 perteneciente a la empresa Obrar SRL, de Casimiro González, en la compañía San Miguel.
En otro trabajo de arreglo de calle se observa a otro camión Scania de color verde con chapa YAU 543, pero en esta ocasión el vehículo es propiedad de Estela Ayala, esposa del intendente.
Ambas situaciones se dieron en julio del 2021, tiempo en el que Casimiro González estaba en plena campaña por su reelección y la administración estaba a cargo del interino Juan Carlos Herreros, a quien lo buscamos, pero no tuvimos éxito.