Durante la noche del viernes último, un grupo de desconocidos atacó el retiro de una estancia ubicada en la ciudad de San Alfredo, departamento de Concepción, propiedad del intendente de dicho distrito, Carlos Pérez. El jefe comunal días antes había pedido mayor seguridad para la zona tras el grave ataque a una patrullera de la Policía Nacional, en el que fueron asesinados dos agentes policiales y un guardia de seguridad privado.
De acuerdo al informe policial, cerca de las 21:00 del viernes, los funcionarios de la estancia se comunicaron con el intendente de San Alfredo y le contaron lo sucedido. Un equipo fiscal, encabezado por el agente Carlomagno Alvarenga, llegó al lugar en la mañana de ayer y constataron que no hubo víctimas humanas, ya que los delincuentes llegaron al sitio para quemar todo lo que había y exigieron a las personas que se vayan del sitio.
La estancia está ubicada en el kilómetro 80 de la ruta PY22, a unos 15 kilómetros de donde fueron atacados los policías a balazos el pasado martes por los integrantes del grupo criminal autodenominado Agrupación Campesina Armada-Ejército del Pueblo (ACA-EP).
El fiscal Alvarenga ordenó levantar evidencias del sitio atacado, donde solo quedaron escombros, entre ellos las chapas que soportaron el fuego tras el incendio del retiro. Hasta el momento no se sabe si el hecho fue perpetrado por miembros del grupo criminal Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) u otra agrupación similar, ya que no dejaron ningún panfleto, nota y tampoco se identificaron ante los empleados del lugar. En tanto, el capataz, su esposa y un peón, horas después del suceso relataron lo ocurrido a las autoridades policiales.