Se trata de la firma Heidecom Sociedad Anónima, representada por Roberto Daniel Arana Riquelme y Gildo Robert Arana Duré, que ganó el llamado de G. 1.123 millones realizado por el Ministerio de Educación y Ciencias para “Construcciones, ampliaciones y reparaciones de 76 establecimientos educativos en el marco de los proyectos financiados por el Fondo para la Excelencia de la Educación y la Investigación (FEEI). La resolución de adjudicación salió el 3 de febrero pasado y fue firmada por el director de Administración y Finanzas del MEC, Alejandro Duarte.
Lo llamativo del caso es que los representantes legales de la firma son parientes del ingeniero Derlis Arana, precandidato a concejal de Ciudad del Este por el movimiento de Lilian Samaniego denominado Participación Republicana”. Otro dato llamativo es que según la página web de la empresa Heidecom, esta se dedica a la tecnología y no a la construcción o reparación de establecimientos.
La misión de Heidecom en su web es “Proveer soluciones integrales, sólidas, estables y sustentables en el tiempo, basadas en tecnologías de punta” y su visión es “Liderar sostenidamente el mercado de tecnología de la información y comunicación de la región”. De hecho, según la web de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP) en la misma dirección que figura la firma, Teniente Rolón Viera 1268 c/ Teodosio González, funciona una productora audiovisual llamada Jatereré.
Cuando este medio fue a verificar el lugar encontramos que también funciona allí la empresa Basement SRL de Roberto Arana Riquelme, esta última ganó recientemente un contrato de G. 342 millones para “Adquisición de insumos de seguridad sanitaria para funcionarios de la Dinac en el marco de emergencia sanitaria de covid-19”. Algo también llamativo teniendo en cuenta que la mayoría de las licitaciones ganadas por Heidecom también son con la Dinac. Otro dato que hay que destacar es que el candidato a concejal por CDE, Derlis Arana, sí tiene una empresa de obras, Arana Constructora, que sería aparentemente el destino final del llamado y las otras firmas solo actuarían de fachada.