En el Día de la Mujer Paraguaya, que se celebró ayer, dirigentes políticas afirmaron que no hay nada por festejar, por el contrario, hay mucho por seguir peleando. Alegan que muchas mujeres que incursionan en la política señalan que muchas que querían incursionar en el campo han desistido debido a que una vez activando son fuertemente discriminadas.
La senadora Blanca Ovelar dijo que no hay nada que festejar tomando como referencia los números que dejan la violencia contra la mujer en el país. “Me asustan los indicadores actuales de violencia, los feminicidios. Mucho todavía tenemos que hacer por la educación en términos de búsqueda de igualdad y equidad en una sociedad justa. Demasiado mucho hay por hacer, yo hoy no tengo nada que festejar”, indicó.
Asimismo, la precandidata a intendenta de Lambaré Blanca Agüero, indicó que el tema de la violencia contra la mujer en la política es algo que aún hay mucho por trabajar, sostuvo que cualquier mujer que desee postularse a cualquier cargo electoral hace un esfuerzo doble frente a los hombres. En tanto, la senadora Desirée Masi sostuvo que hay una barrera de violencia verbal que impide que más mujeres incursionen en la política. Afirmó que “muchas mujeres quieren participar en la política, pero luego las califican de ‘menopáusica o vieja’ y eso las hace retroceder. Esperanza Martínez indicó que “es pesada la carga y desanima”, que al ingresar al ámbito político comienzan a degradar o juzgar por la apariencia física.