Desde la Asociación Rural del Paraguay (ARP) consideran como un verdadero despropósito el intento del Congreso Nacional y del Ejecutivo de desafectar las tierras de Marina Cué a favor de los ocupantes. La nucleación empresarial señala que se trata de solucionar de una manera populista una cuestión social, teniendo las instituciones y herramientas legales para solucionar estos conflictos. Así lo explicó el Dr. Pedro Galli Romañach, titular de la ARP, en conversación telefónica con La Nación.
“Reconocemos la situación social, pero no se puede pisar la ley y hacer un retroceso inmenso en la posición de Paraguay con relación al medio ambiente. Consideramos que sería una verdadera torpeza aprobar esta ley tal y como está”, sostuvo.
La ARP exige a las autoridades que rechacen absolutamente la normativa y que busquen otra solución. “Se trata de un área silvestre protegida con categoría de reserva científica que es la más elevada. Esto podría introducir en una situación grave al Gobierno que está encargado de velar por las leyes del país”, aseveró.
Galli mencionó que el Gobierno no debe ser simpático con grupos oportunistas y populistas, y agregó que una eventual aprobación afectaría gravemente la imagen internacional que Paraguay muestra ante los ojos del mundo. “Esto afectaría gravemente a la imagen internacional, ya que todos los préstamos y acuerdos vienen atados a cumplimientos de normativas medioambientales. Quedaríamos fuera de ellos si esto ocurre”, explicó. Por otra parte, consideró como un sarcasmo que los parlamentarios hayan aprobado recientemente la Ley de Deforestación Cero por diez años más y que ahora el mismo cuerpo legislativo busque aprobar un loteamiento para deforestar un área silvestre protegida.
Por último, Galli lamentó que el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, se haya pronunciado a favor de la normativa. “Lamentablemente, cediendo ante las presiones populistas, pone en riesgo a todo un país y a su propio gobierno”, concluyó.