Pese a que los medios han identificado a varias personas en la alteración de la escena del crimen de Rodrigo Quintana, la fiscala Esmilda Álvarez aún no ha llamado siquiera a una declaración testimonial. El abogado de la heredera de la víctima, Fabián Ramírez, dice que dicha lentitud es sospechosa.
Ya ha pasado casi un mes, varias personas fueron identificadas en la alteración de la escena del crimen de aquella trágica madrugada del 1 de abril del 2017, cuando murió Rodrigo Quintana, en la sede del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), inclusive una persona admitió tocar uno de los elementos, Olga Paredes, sin embargo el Ministerio Público, representado por la fiscala Esmilda Álvarez, no llamó a declarar a nadie de los autores. Solo dio su declaración testimonial Ricardo Estigarribia, abogado de Gustavo Florentín, quien junto a Víctor Raúl Estigarribia y Sandra Barrios, sacaron a la luz las nuevas imágenes.
De confirmarse el caso estaríamos ante un hecho de frustración a la persecución y ejecución penal y posiblemente asociación criminal.
Para el representante legal de la hija y heredera de la víctima, Fabián Ramírez Mora, se presenta muy sospechosa la demora con que actúa la fiscala que investiga el caso, que no ha llamado a nadie a declarar, mucho menos para indagatoria inclusive, pese a que varias personas fueron identificadas, como la abogada Olga Paredes, Ramona Mabel Cantero, Fernando Cáceres, el propio suboficial Juan Cáceres, custodio del diputado Eusebio Alvarenga, como también el chofer de Efraín Alegre, de nombre Luis Osvaldo Sánchez.
También están: Efraín Alegre Irún, hijo del presidente liberal, el polémico Stiben Patrón, quienes son reconocidos en las imágenes cambiando y escondiendo CPU de las oficinas, principalmente de la presidencia.
“No quiero pensar en una deliberada inacción de la Fiscalía o capaz no le quiere perjudicar a sus colegas, quienes ya acusaron, pero no puede ser tamaña lentitud, ya se vuelve sospechosa para nosotros”, dijo Ramírez Mora.
En otro momento Ramírez manifestó que esto de ver por fotogramas es para dar mayor lentitud a la investigación y de esta manera enfriar todo el caso.
“Para nosotros es la excusa perfecta el tema de mirar fotogramas, minuto a minuto para perder tiempo”, dijo el abogado.
Según Ramírez, en la unidad fiscal le manifestaron que tienen recarga de trabajo, por lo que el proceso se vuelve lento, la agente del Ministerio Público está con un juicio de un quíntuple homicidio que concentra el cien por ciento de su atención. Ante esta situación, manifestó el abogado que no es ninguna excusa dicha afirmación.
La fiscala Álvarez había manifestado en su momento que ya avanzó mucho en la investigación, que ya había visto todas las imágenes y que esta semana tendría novedades respecto al tema, pero finalmente dijo otra cosa, que está con recarga de trabajo.