Al estilo del presi­dente brasileño Jair Bolsonaro a inicios de este mes y luego de la muerte de una joven de 18 años de Ciudad del Este, el intendente de la ciudad, Miguel Prieto, se mostró sin tapabocas y en la ocasión había dicho que no cree en el coronavirus, por lo que fue criticado, sobre todo por el incumplimiento del uso obli­gatorio de la mascarilla como medida sanitaria. El pre­sidente del vecino país dijo que el virus se trataba sola de una “gripezinha” hasta que dio positivo al covid-19.

“Yo en lo personal que me disculpen, pero ya no creo más en el coronavirus, ya no creo, ya no me trago tanto este cuento”, había indicado Prieto. A poco más de 15 días de ese suceso, desde la Direc­ción de Comunicación de la municipalidad comunica­ron que la misma permane­cerá cerrada desde el lunes durante 14 días, medida dis­puesta por el intendente de manera preventiva, luego de conocer que tuvo un resul­tado positivo a la prueba del coronavirus. Las críticas no se hicieron esperar debido a que al tratarse de una auto­ridad, Prieto afirmaba que no tomaría las precauciones.

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