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Obras sobrefacturadas y trabajos que figuran en contrato, pero no se hicieron, son algunas “perlitas” de la administración municipal de San Lorenzo, a cargo de Alcibiades Quiñónez. El intendente pagó G. 1.458 millones por obras que, o fueron sobrefacturadas o directamente no se realizaron.
El 18 de julio del año 2019 el intendente municipal firmó contrato con la empresa Renovatio Paraguay SRL para el mejoramiento de 14 plazas de la ciudad. El contrato asciende a la suma de G. 1.216 millones e incluye distintas obras en cada parque.
El 13 de noviembre, tras aprobación de la Junta Municipal, el intendente Quiñónez autorizó la firma de una adenda al contrato, por un monto de G. 241 millones. En total, el monto desembolsado por la municipalidad es de G. 1.458 millones. Concejales municipales, luego de recibir denuncias de comisiones vecinales sobre trabajos no realizados en las plazas y que figuraban en el contrato, ordenaron una pericia que estuvo a cargo del Arq. Alberto Duré y el Ing. Jorge Prono, que determinó sobrecostos y obras fantasmas.
Según el documento elaborado por iniciativa de los concejales Nelson Peralta, Carlos Ferreira, Nery Quiñónez y Silvia Mendieta, las obras de mejoramiento de las 14 plazas demandaron un costo de G. 867 millones. La diferencia entre el monto que pagó el jefe comunal y el costo de las obras, según el avalúo pericial, es de G. 590 millones. En la plaza Imperial, ubicada en el barrio San Luis, se debían realizar obras por G. 130 millones. Pero los trabajos ejecutados, según el avalúo pericial, alcanzan apenas G. 65 millones.
En esta plaza, según el relevamiento, no se realizó el desmonte de columnas, tejido, parque infantil, sanitarios, entre otros. En el contrato figuraba la colocación de 102 postes, de los cuales solo se colocaron 26; 456 metros cuadrados de tejido, pero se colocaron solo 413 metros cuadrados; seis reflectores que cada uno costó al municipio G. 970 mil, cuando que su precio en el mercado no supera los G. 600 mil. Tampoco se hizo el desmonte de piso caminero de 750 metros cuadrados, que costó al municipio G. 6 millones, ni contrapiso, que salió G. 13 millones. No se instaló agua corriente ni desagüe cloacal, de acuerdo a la pericia.
En la plaza Independencia, ubicada en el barrio Santa Ana, se debían realizar obras por G. 87 millones, pero según el avalúo pericial, se hicieron por G. 50 millones. No se realizó el desmonte ni la colocación de columnas de hormigón armado, tampoco el desmonte de piso caminero. También se colocaron seis reflectores que, según el documento, tienen un costo unitario en el mercado de aproximadamente G. 600 mil, pero al municipio le salió cada uno a G. 970 mil.
Otra plaza, donde la pericia encontró obras no realizadas es Porvenir, en el barrio Capilla del Monte. El municipio pagó G. 6 millones por 345 metros cuadrados de contrapiso, pero solo se hicieron 130 metros cuadrados, y G. 16 millones por 345 metros cuadrados de piso de HoAo 5 CM. C/JUNTA C/ 2M, sin embargo, solo se realizaron 280 metros cuadrados.
OBRAS DE MUY BAJA CALIDAD
Para el Arq. Alberto Duré, quien verificó a pedido de concejales municipales las obras en las plazas, la calidad de las mismas da mucho que desear. Duré indicó que hay trabajos que figuraban en el contrato, pero que no se hicieron. “Hay obras que no se ejecutaron, rubros que no se ejecutaron en ciertas plazas”, afirmó el arquitecto. Comentó que en algunas plazas, por ejemplo, se tenía que colocar cierta cantidad de metros cuadrados de vallado perimetral, pero encontraron menos.
“Lo más triste es que la calidad de las obras da mucho que desear, el sistema constructivo que emplearon (…)”, dijo Duré a La Nación. “No hay una que de repente uno diga ‘qué bien ejecutaron’, todas están con muchas falencias constructivas, más bien dejan mucho que desear las terminaciones de cada una de ellas”, añadió.
SE SOMETE A INVESTIGACIÓN
El intendente de San Lorenzo, Alcibiades Quiñónez, confirmó que ya existe una denuncia en la Fiscalía y afirmó que se hará responsable de lo que resulte la investigación. “Se inició el proceso en la Fiscalía, de verificación, ante una demanda que hizo un ciudadano, entonces yo no puedo ya opinar, pero si voy a ser responsable de lo que resulte la investigación fiscal y también ya está en el ámbito del órgano contralor natural de los municipios que es la Contraloría”, dijo Quiñónez a La Nación.
Manifestó que todo lo actuado se hizo en el marco de las disposiciones de Contrataciones Públicas. No obstante, con el actual escenario dispondrá la verificación de todas las obras. “Por supuesto que tengo que ir haciendo verificar, yo me baso en lo que dictaminó el fiscal de Obras (…). Se hicieron los pagos en base a lo que dictaminaba el fiscal”, lanzó el jefe comunal.
Empresa sin muchos antecedentes en Contrataciones como proveedora
La empresa Renovatio Paraguay SRL no registra muchos antecedentes como proveedora en el sector público, según los datos publicados en el portal de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP). Renovatio Paraguay, de acuerdo con la información publicada en su sitio web, se desempeña en las áreas de infraestructura e innovaciones.
La firma, que tiene como representante legal a Emilio Acevedo, figura como proveedora desde el año 2015, según los registros de la DNCP. Sin embargo, tiene un solo contrato en la Municipalidad de San Lorenzo del año pasado. En el contrato firmado el 18 de julio se estableció un plazo de ejecución de obras de 60 días. El 13 de noviembre, el intendente Alcibiades Quiñónez concedió otros 42 días a la empresa, que había solicitado la prórroga.
Inclusive, la firma en cuestión presentó una planilla de cambio de especificaciones técnicas con visto bueno del fiscal de Obras de la comuna, Óscar Acosta, a fin de realizar “trabajos compensatorios” por rubros no ejecutados, que finalmente autorizó el intendente, a la vez de una adenda al contrato inicial.