“El discurso de violencia más del entorno de Efraín Alegre es insosteni­ble. Hendy kavaju resa (bri­llan los ojos del caballo), se diría lo que es la situación en el PLRA. En vez de tirarle agua, le estamos tirando gasolina al problema”. De esta manera graficó la situa­ción que se vive en el PLRA, Eduardo Nakayama, diri­gente del citado partido polí­tico con representación par­lamentaria.

Sus declaraciones se dieron durante una entrevista en un medio radial de esta capital, ocasión en que Nakayama lamentó que el internismo en el PLRA y las recientes expulsiones del Directo­rio de esa nucleación polí­tica a liberales no alineados con Efraín Alegre, práctica­mente está llevando a “liqui­dar al partido”.

De acuerdo con una publica­ción del digital ADN, Naka­yama sindicó, igualmente, a Efraín Alegre como “un nuevo dictador” que no tolera el disenso y que su conducta ya “es demasiado” porque trata por cualquier medio de imponer única­mente su parecer.

Señaló también que no teme que Alegre lo expulse a él y que, si lo hace, “se ganará la corona de dictador”. “Si tiene la valentía de hacerlo que lo haga hoy”, desafió Naka­yama.

“Se está incendiando el par­tido. Muchos de los cercanos a Alegre ya han manifestado abiertamente su intención de crear un nuevo partido. Lo que están haciendo ahora dentro del PLRA es como tirar gasolina. No existe ya la disidencia. Es lamentable la situación”, añadió.

“Si Efraín llega al poder, ¿qué piensa hacer? ¿Piensa revi­vir el ’47 y hacer una gue­rra civil y matar a la mitad de la población y a la otra mitad mandarla al exilio? ¿Qué piensa hacer, gobernar solo?”, finalizó Nakayama.

Nakayama dijo también ayer que el internismo entre el llanismo y el efrainismo es lo que “está liquidando al Partido Liberal”. Desde la perspectiva del historia­dor liberal, Efraín Alegre y el senador Blas Llano no tienen la suficiente madu­rez para dialogar y llegar a acuerdos. Nakayama, ade­más, criticó la decisión de Alegre de expulsar a trece directores partidarios del llanismo y se refirió hacia él como un “nuevo dictador” debido a que no admite disi­dencias dentro del PLRA.

Mientras todo eso ocurre en el PLRA, el senador liberal Amado Florentín ya anunció que se encuentra buscando los 23 votos que necesita de sus colegas para presidir la Cámara Alta –y el Congreso Nacional– por el siguiente periodo legislativo. Quien lo ayuda, “liderando” la caza de votantes, es su colega parla­mentario y partidario Víc­tor Ríos.