El presidente de la Cámara de Diputados, Pedro Alliana, tuvo que poner paños fríos y llevar a un cuarto intermedio la sesión extraordinaria de ayer después de un fuego cruzado de incontinencia verbal por parte de legisladores de casi todas las bancadas. Fue en el momento en que se estaba tratando el proyecto de declaración que insta al Gobierno a controlar la especulación de precios de artículos de limpieza y medicamentos durante la emergencia de la COVID-19.
El diputado Sebastián García (PPQ), en representación de la multibancada, solicitó incluir a empresas que lucran con el Estado con compras sobrefacturadas. En respuesta, el diputado colorado Juan Carlos “Nano” Galaverna cuestionó duramente a sus colegas de la multibancada que fueron hasta el aeropuerto Silvio Pettirossi a verificar la carga que llegó el sábado. Dijo que se presta a pensar que ese acto fue solo de “figuretismo”.
A partir de allí, el descontrol fue ganando protagonismo y las acusaciones entre legisladores de distintas bancadas fueron subiendo de tono. Desde traidores a la patria, corruptos y sinvergüenzas, nadie se ahorró ninguna opinión, por lo que el presidente Alliana decidió declarar cuarto intermedio hasta que los ánimos se tranquilicen. Así fue. Al volver a la sala, la calma se apoderó del lugar.