El ministro de Salud Pública, Julio Maz­zoleni, mantendrá el martes un encuentro con gobernadores e intenden­tes cuyas zonas están afec­tadas por la crisis sanitaria generada por el COVID-19. La reunión servirá para lle­var adelante un plan de con­tingencia ante la enferme­dad considerada como una pandemia, el cual consistirá en la adquisición de terrenos para la excavación de fosas comunes.

La información fue corrobo­rada por fuentes cercanas al presidente de la República, Mario Abdo Benítez. “Tam­poco se descarta que asistan otros gobernadores e inten­dentes cuyos sitios podrían arrojar casos. El objetivo es prepararlos y prever ya una estrategia, tener una propie­dad preparada para las fosas comunes como las que se ven en Brasil”, refirieron.

La mayoría de los casos hasta el momento se registran en el departamento Central y la capital del país. No obstante, en menor manera están afectados Alto Paraná, Cor­dillera, Caaguazú, Misiones y Boquerón.

“En compañía del presidente Mario Abdo Benítez, hici­mos una revisión técnica del horno pirolítico de la Senad. Ponemos a la orden de Salud todos nuestros recursos pre­parándonos siempre para lo peor, pero esperando lo mejor. Quédate en casa”, mani­festó en su cuenta de Twit­ter el titular de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), Arnaldo Giuzzio.

La supervisión de la máquina que se estaría utilizando para el proceso de crema­ción fue acompañada por el médico forense del Minis­terio Público, Pablo Lemir. El horno sería utilizado en el caso de que se tenga una gran cantidad de muertos por la enfermedad. “Siem­pre la cremación, en todos los contextos forenses, se con­sidera como última opción. Ahora todo eso se socializa con el presidente de la Repú­blica y el Ministerio de Salud Pública para que las muni­cipalidades vean un terreno para las fosas. Obviamente no ahora, pero es para que vayan pensando”, dijo el médico en comunicación con el canal GEN respecto al plan de con­tingencia para la adquisición de los terrenos aislados de la ciudadanía.

El horno fue inaugurado en el 2018 y se encuentra ubicado en la ciudad de Villa Hayes, departamento de Presi­dente Hayes, y cuya inversión alcanzó los G. 4.000 millo­nes. La estructura funciona en el predio de la Dirección de Evidencias de la Senad. La máquina fue construida para tener la capacidad de incine­rar 150 kilos de drogas por hora, con una temperatura de 1.200 grados centígrados, sin emitir gases.