El jefe de Gabinete Civil de la Presiden­cia de la República, Juan Ernesto Villamayor, de manera completamente irres­ponsable se presentó ayer en el Palacio de López, tras regresar el viernes último de la Argen­tina, sin haber cumplido con la cuarentena, argumentando que el protocolo del Ministerio de Salud aún no regía cuando ingresó al país.

Según su razonamiento, la pan­demia del coronavirus comenzó recién cuando las autoridades sanitarias establecieron la norma y, por lo tanto, él no pudo haberse contagiado con la enfer­medad antes de la entrada en vigencia de la medida.

Villamayor no solamente puso en riesgo a familiares y perso­nas cercanas, sino también a todos los periodistas acredi­tados para la cobertura presi­dencial, quienes inmediata­mente fueron asistidos por el personal de salud del Palacio de Gobierno. “Buenos Aires no estaba aislada. Ruego que se informen adecuadamente para estar de acuerdo en un punto básico. No se pueden establecer normas retroactivas. Cuando yo ingresé al país esa norma (aislamiento) no regía. No salí un milímetro durante mi esta­día”, indicó en un intento de jus­tificación, en medio de su acos­tumbrada perorata. También dijo que no violó el protocolo, porque la disposición no puede ser retroactiva. Sin embargo, a sabiendas de que comenzó a regir el lunes, ayer martes se presentó en su lugar de “tra­bajo” y tras ser cuestionado por su actitud, llamó a una confe­rencia de prensa, que fue abrup­tamente suspendida, porque al ser criticado finalmente decidió retirarse raudamente del lugar.

El jefe de Gabinete de Mario Abdo Benítez acompañó en su viaje al ministro de Hacienda, Benigno López, a la Argentina, y regresaron juntos el viernes. López decidió aislarse desde ese momento, pero Villamayor se sintió intocable por el virus y hasta por el protocolo de Salud Pública. El mismo no fue reci­bido por el jefe de Estado en su despacho. Médicos de la Décimo Octava Región Sani­taria del Ministerio de Salud inspeccionan y monitorean a partir de la víspera a las perso­nas que mantuvieron contacto con el jefe de Gabinete Civil.

Una funcionaria de limpieza desinfectó de manera inme­diata el mueble y micrófono que utilizó Villamayor antes de salir de la sala. El minis­tro de Salud, Julio Mazzoleni, también rechazó la actitud de Villamayor, indicando que todas las personas que proven­gan de otros país deben some­terse a la disposición. “La reso­lución del Ministerio de Salud habla de que en este país cual­quier persona que provenga de otro país debe guardar aisla­miento”, manifestó.

De acuerdo a lo manifestado por el ministro del Interior, Euclides Acevedo, el jefe de Gabinete de la Presidencia, Juan Ernesto Villa­mayor, no violó el código sanitario establecido por las autoridades, al no someterse a una cuarentena, tras regresar de la capital argen­tina.

“Yo creo que el ministro (Ernesto) Villamayor ha cumplido estrictamente el protocolo y si el ministro está por acá es porque está absolutamente seguro de que no ha violado ninguna norma. Es una persona seria, educada, responsable y no creo que haya vio­lado absolutamente ningún protocolo”, aseguró el secretario de Estado.

Seguidamente, en una actitud desafiante, Acevedo instó a la ciudadanía a denunciar a Villamayor si tiene prueba acerca de que ingresó al país antes de la entrada en vigencia del decreto pre­sidencial que estipula la obligatoriedad de la cuarentena, para fre­nar la expansión del coronavirus. “Si alguien tiene la prueba (de lo contrario) puede hacerlo (denunciarlo)”, aseguró.